
Madrid, 24 jul (EFE).- El coste laboral neto por año y trabajador fue de 30.535,92 euros en 2017, un 0,1 % más que el año anterior, según recoge la Encuesta Anual de Coste Laboral publicada hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Una vez sumado a esa cantidad los 208,83 euros en concepto de subvenciones y deducciones recibidas de las Administraciones Públicas para fomentar el empleo y la formación profesional, el coste laboral bruto ascendió a 30.744,75 euros, también un 0,1 % más.
El pasado año, el salario suponía un 74,2 % del coste total, con un importe bruto medio por trabajador de 22.806,95 euros, un 0,1 % más.
Respecto a los costes no salariales, las cotizaciones obligatorias a la Seguridad Social ascendieron a 7.115,88 euros por trabajador, un 23,2 % del coste total.
El conjunto de los salarios y las cotizaciones a la Seguridad Social coparon el 97,3 % del coste bruto, a lo que se añaden 299,14 euros para beneficios sociales (como planes de pensiones), 237,07 euros para gastos derivados del trabajo (como indemnizaciones por fin de contrato), 195,87 euros por indemnizaciones por despido y 89,84 euros por formación profesional.
De acuerdo con la encuesta, las actividades con mayor coste laboral bruto fueron el suministro de energía eléctrica, gas, vapor y aire acondicionado (74.275 euros), actividades financieras y de seguros (63.776 euros) y las de información y comunicaciones (50.472 euros).
Por el contrario, los costes más bajos correspondieron a hostelería (18.845 euros), otros servicios (20.552 euros) y actividades administrativas (21.465 euros).
En cuanto a la evolución, el mayor aumento del coste laboral bruto, del 3,1 %, se dio en las actividades financieras y de seguros y el mayor retroceso, del 3,7 %, en el suministro de energía eléctrica, gas, vapor y aire acondicionado.
En cuanto al tamaño de la empresa, las de más de 200 trabajadores registraron el mayor coste total bruto (37.806 euros), salarios (28.283 euros) y cotizaciones sociales (8.385 euros), así como los beneficios sociales y gastos en formación profesional más significativos.
El coste bruto por trabajador de las empresas de entre 50 y 199 trabajadores se situó el pasado año en 32.960 euros y el de las firmas con 49 empleados o menos, en 25.159 euros.
El pasado año, el 94,2 % de los centros, que representan el 88,6 % de los trabajadores, regularon sus relaciones laborales mediante convenio colectivo, en línea con el ejercicio 2016.
Uno de cada cuatro trabajadores y uno de cada cuatro centros de trabajo está amparado por un convenio colectivo estatal, mientras que la mitad de los empleados (y el 65 % de las empresas) tienen un convenio inferior (autonómico, provincial...).
El 3,2 % de los centros de trabajo, que emplean al 17,4 % de los trabajadores, cuentan con un convenio colectivo de empresa.
La estadística también revela que el 1,8 % de los centros con convenio, que representaban al 3,1 % de los trabajadores, modificaron sus condiciones de trabajo el pasado año.
Por comunidades autónomas, los mayores costes laborales netos por trabajador se registraron en Madrid (36.136 euros), País Vasco (35.551 euros) y Navarra (32.973 euros).
En cambio, los más bajos fueron los de Extremadura (24.745 euros), Canarias (25.987 euros) y Murcia (27.108 euros).