
La canciller alemana, Angela Merkel, se reúne hoy con el director gerente de Mecanismo de Estabilidad (MEDE), Klaus Regling, con el fin del programa financiero griego y el futuro del fondo de rescate sobre la mesa.
El encuentro, sobre el que no está programada una comparecencia ante los medios, se enmarca dentro de los encuentros regulares de la jefa del Gobierno alemán con responsables de las instituciones comunitarias y pretende abordar temas de actualidad.
"El encuentro del jueves con Regling es un intercambio de opiniones como los que la canciller lleva a cabo a menudo con los responsables de las instituciones europeas", explicó ayer en una rueda de prensa el portavoz del Ejecutivo, Steffen Seibert.
Sobre los asuntos en la agenda bilateral, el portavoz evitó concreciones más allá de señalar que se abordarán "cuestiones actuales relativas a la eurozona".
Dennis Kolberg, portavoz del Ministerio alemán de Finanzas, recordó ayer también que en la actualidad se trata de la cuarta revisión del programa de rescate griego, en el que aún hay "algunas tareas que resolver".
Además, reconoció que parte del debate actual entre los ministros de Finanzas de la eurozona se centra en qué pasará una vez que acabe el actual programa griego, el tercer rescate a Atenas, al que le quedan menos de cuatro meses, y si entonces serán "necesarias posibles medidas sobre la deuda".
"Sobre estas cuestiones se decidirá en su momento, antes del final del programa", agregó Kolberg en referencia a las peticiones de Atenas de una nueva reestructuración de la deuda soberana helena, para aligerar sus cargas.
Representantes del MEDE, junto a otros de la Comisión Europea (CE), el Banco Central Europeo (BCE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) viajarán el próximo 14 de mayo a Atenas para analizar cómo ha cumplido Grecia con las condiciones del rescate y tratar de cerrar así la revisión final del programa.
El objetivo es confirmar que Grecia ha cumplido con las 88 acciones que se le exigían en el programa de rescate en contrapartida con los hasta 86.000 millones de euros que se le ofrecieron, de modo que la revisión pueda darse por concluida en el Eurogrupo del 21 de junio, un paso imprescindible para que el programa se cierre el 20 de agosto, como está previsto.
Según apuntó Regling recientemente, con el visto bueno de las instituciones se dará también luz verde a un nuevo desembolso para Atenas, de un tamaño "considerable" aún por determinar.
El segundo punto en la agenda del encuentro de Merkel y Regling atañe a la propuesta de reconvertir el MEDE en una versión europea del FMI, dotándole de más capacidades y competencias.
Tanto París como Berlín están a priori a favor de ampliar las funciones del MEDE, pero sectores del partido de Merkel, la Unión Cristianodemócrata (CDU), han apuntado que, pese a los cambios, el control último de este fondo de rescate -y de cómo dispone del dinero que le entregan los países miembros- debe seguir estando en los parlamentos nacionales.