El compromiso del Mobile World Congress de celebrarse en Barcelona al menos hasta 2023 se mantendrá si los organizadores ven garantizado un entorno "estable y seguro", expuso en rueda de prensa el portavoz de la GSMA -asociación impulsora del evento-, Michael O'Hara, que agregó: "Esperamos tener un entorno en la ciudad que nos lo permita".
Pese a que los hoteles todavía tienen habitaciones disponibles para la cita que tendrá lugar del 26 de febrero al 1 de marzo en el recinto Gran Via de Fira de Barcelona, como adelantó elEconomista, la GSMA confía en superar los 108.000 asistentes y los 2.300 expositores en la edición "más grande y mejor" del congreso, que acoge la capital catalana por decimotercer año, indicó el consejero delegado de GSMA, John Hoffman. Matizó que no pretenden organizar el congreso más grande del mundo pensando solo en cifras absolutas, sino en reunir a "los mejores".
Frente a ediciones anteriores en las que acudieron ponentes estrella como el fundador de Facebook, Mark Zuckerberg, o el de Netflix, Reed Hastings, este año no habrá nombres mediáticos. La organización lo atribuye a que quieren centrarse en las tecnologías del futuro, como la inteligencia artificial y el Internet de las Cosas, más que en el presente. Entre las novedades del MWC18, destaca una prueba piloto para que los asistentes al congreso puedan acceder al recinto ferial mediante reconocimiento facial.
Dudas en octubre
La inestabilidad política de octubre provocó consultas a la GSMA de expositores y asistentes, así como alguna cancelación de empresas de pequeño tamaño, pero la asociación afirmó a este diario que ahora hay "tranquilidad".
En cualquier caso, O'Hara explicó que tienen otras ciudades llamando a su puerta: "Siempre hay interés por el Mobile World Congress". Hoffman incidió en que "es importante para todos que los asistentes se lleven una buena impresión". El primer teniente de alcalde de Barcelona, Gerardo Pisarello, confió en que la edición de este año sea un éxito y ayude a contentar a la GSMA, aunque reconoció que la falta de gobierno en la Generalitat no es la situación ideal. Mientras, Barcelona quiere contribuir al mantenimiento del MWC con una recepción que presidirá hoy la alcaldesa, Ada Colau, acompañada por el presidente del Parlament, Roger Torrent; el secretario de Estado de tecnología, José María Lassalle, y el presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete, así como representantes de centros de I+D y empresas locales.
