
Su titular es la segunda autoridad autonómica tras el 'president'
C's defiende que no puede optar a formar gobierno en Cataluña por aritmética parlamentaria, ya que los partidos independentistas ganaron por mayoría absoluta las elecciones del 21-D, pero no renuncia a hacer valer su triunfo en votos y escaños. Se plantearía una investidura si no hubiese un acuerdo suficiente entre los rupturistas y, de momento, el portavoz de C's en el Parlament, Carlos Carrizosa, desveló ayer que han trasladado al resto de grupos su intención de optar a la presidencia de la cámara catalana, que es la segunda autoridad en Cataluña tras el presidente de la Generalitat.
En una entrevista de Catalunya Ràdio, argumentó que el Parlament es un órgano pensado para controlar al Govern, por lo que sería "democrático" que ocupara la presidencia el partido más votado y líder de la oposición. Con todo, la mayoría independentista les permite controlar la Mesa y su presidencia.
La aspiración de C's complicaría forzar el reglamento o modificarlo para investir de forma telemática a Carles Puigdemont como presidente catalán, lo que la formación naranja ya ha anunciado que impugnaría, porque no lo ve legal. Además, JuntsxCat quiere restituir las instituciones catalanas anteriores a la aplicación del 155, lo que supondría que Carme Forcadell repitiese al frente del Parlament, aunque tiene causas judiciales pendientes por su implicación en las decisiones rupturistas. Mientras, ERC sopesa ceder un diputado a la CUP para que pueda formar grupo parlamentario propio.