
La prensa alemana destaca que la premier Theresa May estuvo abatida en la última Cumbre en Bruselas y suplicó un período de dos años de transición para no ser descabalgada en Reino Unido. La canciller Angela Merkel, a pesar de haber perdido la paciencia con los británicos, quiere que May siga al frente de las negociaciones. l ¿Qué pasará si no hay acuerdo con el Brexit en diciembre? Un 2018 de caos aéreo, falta de alimentos y medicinas
Un diario alemán indicó el pasado domingo que la líder conservadora "había suplicado" ayuda en el proceso del Brexit, además de apuntar que ésta parecía "ansiosa, desalentada y desanimada".The Times publica hoy que Merkel está "preocupada" sobre todo por la posibilidad de que las negociaciones puedan "derrumbarse", lo que podría dañar las economías europeas y terminar con el Ejecutivo de May.
Esa última posibilidad, señala el diario, podría implicar que la dirigente conservadora fuera reemplazada por el actual titular de Exteriores, Boris Johnson, a quien los alemanes perciben como un político más hostil y con un enfoque menos realista ante el proceso negociador.
"Angela Merkel está furiosa con lo que se ha publicado. Se sabe que ha perdido la paciencia con los conservadores británicos pero lo último que quiere es que Theresa May sea reemplazada a mitad de las negociaciones del Brexit", señaló la mencionada fuente de Berlín.
El presidente de la Comisión Europea, Jean Claude Juncker, se ha mostrado sorprendido ante esas informaciones y ha aclarado al respecto que el encuentro con la política británica "fue una excelente cena de trabajo".
Se abren trabajos previos
Oficialmente, Theresa May logró sacar la declaración oficial del Consejo de abrir los trabajos previos a la segunda fase de las negociaciones, que se centrarán en la futura relación comercial entre los países del continente y Reino Unido. Aunque desde Bruselas, se subrayó que las conversaciones estancadas.
El principal escollo que está habiendo entre los dos bloques es la cuantía que está dispuesto asumir Reino Unido por salir de la Unión Europea. Antes de la cita, ya hubo salida de tono por la factura que debe pagar Londres. Los líderes europeos han decidido dar un voto de confianza a May para que en septiembre haya acuerdo en las tres prioridades para ambas parte: economía, derechos de los ciudadanos y frontera entre las irlandas.