
A dos meses de cerrar la negociación de los Presupuestos Generales del Estado de 2018, el Gobierno vasco ha vuelto a verbalizar una histórica petición: la gestión económica de la Seguridad Social, una de las cuestiones que esperan trabajar con el Ejecutivo central, intentando avanzar en esta materia.
En estos términos se expresaba ayer la consejera vasca de Empleo, Beatriz Artolazabal, en el marco de la firma de un convenio con el Ministerio de Empleo, y por el cual la Tesorería General de la Seguridad Social y del Servicio Público de Empleo Estatal facilitarán a la Comunidad Autónoma del País Vasco ficheros nominativos por indicación de la empresa y cuenta de cotización; detalle de las personas trabajadoras; y en regímenes por cuenta ajena: con bases de cotización por contingencias comunes y profesionales, el importe bonificado, el colectivo incentivado, el tipo de contrato de trabajo y otros datos identificativos del trabajador.
Tras la firma del acuerdo, el Ministerio que dirige Fátima Báñez insistía en la naturaleza de este convenio, que en definitiva es una herramienta de gestión para el Gobierno vasco, referido a las políticas activas de empleo, pero que de ningún modo puede interpretarse como el prólogo de una transferencia en esta materia que alude a la Seguridad Social.
Y así lo defendió ayer la ministra Fátima Báñez ante los presentes al acto que tuvo lugar en Vitoria. La titular de Empleo ponderó frente a esta petición el modelo de la caja única de las pensiones que ha hecho posible pagar más pensiones que nunca en Euskadi. Profundizando sobre esta cuestión, Báñez remarcó el gran corazón del Sistema de Bienestar en España, que no es otro que el modelo de pensiones, descartando de este modo que el Gobierno esté en la línea que ayer adelantó el ejecutivo de Iñigo Urkullu. En este sentido, destacó que el País Vasco es una de las comunidades donde los pensionistas tienen unas de las pensiones medias más altas -por encima de los 1.300 euros-, cuando en España la media se sitúa en los 1.065 euros.
La ministra del ramo rebatió los argumentos de la consejera Artolazabal, apoyándose en la solidaridad y al compromiso de todos los españoles, lo que ha hecho que el sistema de pensiones posibilite que la pensión en Euskadi haya subido desde el año 2011 hasta la actualidad un 15 por ciento.
En cualquier caso, recalcan fuentes ministeriales a elEconomista, la petición de la consejera vasca está formulada sin vehemencia política, y recordando "de pasada" que es uno de los acuerdos firmados entre el PNV y el PSE. En sí, estas declaraciones no han sido traducidas desde Empleo como una exigencia de los nacionalistas de cara a los Presupuestos Generales. Más bien lo enmarcan como parte de la liturgia política.
Además, justo en un momento de acercamiento entre las dos ejecutivos, y de acuerdos que han dado fruto a un desarrollo competencial plasmado en convenios como el de ayer, que en este caso facilitará la optimización de recursos y la eliminación de duplicidades.
Claves hasta las elecciones
Soraya Sáenz de Santamaría tuvo también ayer una presencia significativa en Euskadi. Acompañando a Fátima Báñez y Alfonso Alonso, la vicepresidenta destacó -enviando un mensaje de elogio al Gobierno de Urkullu, y por el contrario de reproche al de Puigdemont- que la actual legislatura es "colaborativa", gracias en gran medida a los acuerdos y al diálogo" entre el Gobierno central y el vasco, ya que "Euskadi está contribuyendo a la estabilidad de España a través de importantes acuerdos". En esta línea, matizó que aquellos Ejecutivos "que apuestan por esta forma de trabajar y de gobernar, refrendan la confianza de los ciudadanos".
Dirigiendo otro dardo a la Generalitat de Cataluña, en palabras de Santamaría éstas van a ser las claves de los próximos meses y hasta de las próximas elecciones, por lo que es importante que, día a día y a través del entendimiento, "nos asentemos en la centralidad y moderación".