
La escasez de mano de obra en Japón está pasando a ser un problema grave para las empresas que trabajan con márgenes muy ajustados y viven del trabajo de baja cualificación. Tiendas como 7-Eleven, FamilyMart y Lawson no logran encontrar personal, porque en una sociedad en la que la tasa de paro es del 2,8%, son pocos los que están dispuestos a trabajar a tiempo parcial como vendedores en este tipo de tiendas. | La otra cara de la 'japonización'
Este tipo de empleos suelen ofrecer una remuneración relativamente baja debido a la parcialidad del trabajo, que suelen ser de 20 o 24 horas semanales. En EEUU o Europa, este tipo de trabajos suelen encajar entre los más jóvenes, que buscan ingresar algo de dinero a la que par que estudian. Aunque tras la última crisis las personas que trabajan a tiempo parcial, pero desearían trabajar más horas, han aumentado de forma considerable.
Sin embargo, Japón tiene un problema importante en su mercado laboral. La población de este país están disminuyendo año tras año, pero sobre todo lo que se ha visto reducido es la fuerza laboral. En 1995 en Japón había 87,2 millones de personas en edad trabajar y que buscaban empleo de forma activa. En 2015 esta cantidad ha caído hasta los 77,2 millones de personas y se espera que en 2065 sea de 45,2 millones.
Las empresas que trabajan con pequeños márgenes explican que sus plantillas deben estar formadas por una cantidad numerosa de trabajadores a tiempo parcial que permitan mayor flexibilidad de horarios. 7-Eleven, FamilyMart y Lawson están intentando aliviar la presión de sus franquiciados ofreciendo ayuda financiera y promoviendo la automatización completa algunos puestos de trabajo, explican desde Reuters.
Cadenas como Royan Host o McDonald's están planeando abandonar su horarios de 24 horas porque no encuentran personal para el turno de la noche. Este descenso de la fuerza laboral está afectando sobre todo a los sectores más intensivos en mano de obra, como las empresas de envíos, las cadenas de restaurantes y las de ventas al por menor.
Los salarios suben para atraer trabajadores
Un franquiciado de Lawson en Tokia explica que el problema real derivado de la escasez de trabajadores dio comienzo hace un año. Los salarios de este tipo de empleos están aumentando para intentar atraer a los trabajadores, mientras que algunas tiendas se están viendo obligadas a multiplicar las horas extras de muchos de sus empleados para cubrir turnos, aunque se produzca un descenso de la productividad por hora trabajada.
Ryuchi Isaka, presidente de Seven&Holdings, comenta que "los costes de la mano de obra están aumentando de forma desorbitada". Los franquiciados tienen problemas para soportar el coste de las nóminas por lo que las franquicias están reduciendo parte de los royalties que cobran a los franquiciados.
Lawson prevé que este año se van a reducir sus beneficios por primera vez en casi dos décadas, sin embargo, Sadanobu Takemasu, presidente de la firma, destaca que "no hay que centrarse en el crecimiento de los beneficios, estamos buscando qué forma debe tomar Lawson. Haciendo las inversiones necesarias volveremos a recuperar el crecimiento de los beneficios".
Las vacantes de empleos en Japón se han incrementado en febrero hasta las 927.330. En 2009, las vacantes apenas alcanzaban las 500.000, además la tendencia al alza parece que podría incrementarse a medida que la fuerza laboral siga descendiendo por el envejecimiento de la población.