
Los países del G20 dijeron este sábado, tras su reunión en la ciudad alemana de Baden Baden, que trabajarán "para fortalecer la contribución del comercio" a la economía global, así como para "reducir la desigualdad" en el objetivo de crecimiento económico. EEUU dificultó las negociaciones.
La presidencia alemana del G20 admitió que en la cumbre de ministros de Finanzas no se logró un acuerdo sobre el futuro de las relaciones comerciales aunque si se subrayó el significado del comercio internacional.
"Hemos estado de acuerdo en la importancia del comercio internacional aunque no llegamos a un consenso sobre el futuro de las relaciones comerciales", dijo el presidente del Bundesbank alemán, Jens Weidmann, en la conferencia de prensa final.
El ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schäuble dijo que para el comunicado final se había llegado a ciertas declaraciones que, aunque no son demasiado concretas, muestran el compromiso común con un comercio justo.
"Hemos llegado a declaraciones con las que no se avanza mucho, pero que muestran nuestro compromiso con un comercio justo y con la no manipulación de los tipos de cambio", dijo Schäuble.
Schäuble dijo además que en ciertos encuentros "no hay que pedir demasiado de algunos de los socios" y recordó que el secretario del Tesoro de EEUU, Steven Mnuchin, no tenía un mandato para aceptar ciertas declaraciones comerciales.
La presunta manipulación de tipos de cambio es uno de los temas recurrentes del gobierno del presidente de EEUU, Donald Trump, por lo que Schäuble fue interrogado si ese asunto había tenido un papel importante en el debate y el ministro alemán lo negó.
"El tema de los tipos de cambio se resolvió rápido. Nadie vio razón en discutir sobre algo en lo que todos estábamos de acuerdo", dijo.
Con respecto a otros aspectos de la reunión, Schäuble dijo que hubo consenso sobre la recuperación de la economía mundial.
"Hubo consenso en que la recuperación de la economía mundial avanza, pero el crecimiento es menor del que se desearía", dijo.
Con respecto a quienes creen que el comunicado es una decepción por ser demasiado vago en muchos temas, Schäuble dijo que "a veces hay que considerar que en estos encuentros no se le puede pedir demasiado a algún socio".
En torno al multilateralismo, Schäuble ironizó que todos lo defienden, pero "todos lo entienden de forma distinta".
"Tal vez tengamos que mostrarle a uno que otro Estado importante cómo funciona la cooperación internacional, cómo tienen que tener consideraciones los unos con los otros", dijo Schäuble.
"Creo que los americanos vieron que también tenemos consideración con ellos", dijo.
EEUU dificulta las negociaciones
A diferencia de otras reuniones del G20, cuyos países representan el 80 % del comercio mundial, esta vez no se condena el proteccionismo económico.
El secretario del Tesoro estadounidense, Steven Mnuchin, dijo al respecto que "lo que estaba en anteriores comunicados del G20 no es necesariamente importante ahora" y pidió que no se lea demasiado en el lenguaje del comunicado, aunque posteriormente reconoció que el texto debe reflejar las discusiones que han mantenido.
Mnuchin también señaló, en una rueda de prensa en Baden Baden posterior a la reunión de ministros, que es necesario corregir los desequilibrios globales en el comercio en los casos que se produzcan, tras ser preguntado por el superávit comercial de Alemania.
Pese a todo, Mnuchin calificó la reunión de "increíblemente productiva" y dijo que se va con confianza.
Afirmó que "EEUU cree en el comercio; en el comercio libre, justo y equilibrado".
"Queremos una situación de ganar a ganar, en la que lo que es bueno para nosotros es bueno para otros", añadió el secretario del Tesoro estadounidense.
Consideró que algunas normativas de la Organización Mundial del Comercio (OMC) no están en vigor y que quiere ponerlas en marcha para favorecer a los trabajadores estadounidenses.
Dijo que algunos acuerdos como el NAFTA (EEUU, México y Canadá) son "viejos" y que han acordado con estos países volver a examinarlos.
Mnuchin añadió que el cambio climático es más apropiado para una reunión de jefes de Estado y de Gobierno y no tanto para una reunión de los ministros de Finanzas y gobernadores de bancos centrales del G20.
"El comercio es un asunto económico y creo que era importante en este G20", dijo Mnuchin.
El presidente de EEUU, Donald Trump, va a mirar el Acuerdo de París y otros acuerdos sobre medidas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, según Mnuchin.
El ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schäuble, reconoció que las negociaciones habían sido muy difíciles y que, en cierto sentido, se encuentran congeladas, pero también que se abre la puerta para futuras negociaciones.
Compromisos
Por otra parte, en el comunicado que resume las conclusiones de las negociaciones, celebradas en la ciudad alemana de Baden Baden, el G20 también mantiene los compromisos adquiridos hasta ahora respecto a los tipos de cambio para evitar devaluaciones e impulsar la competitividad.
Tampoco dirigirán los tipos de cambio de las divisas para fines competitivos.
Los países del G20 también se comprometen a "calibrar cuidadosamente y comunicar claramente" sus acciones de política macroeconómica y estructurales "para reducir la incertidumbre política, minimizar contagios negativos y promover la transparencia".
"Estamos trabajando para fortalecer la contribución del comercio en nuestras economías. Nos esforzaremos en reducir los desequilibrios globales excesivos, promover una inclusión y justicia mayor y reducir la desigualdad en nuestra aspiración de crecimiento económico", se añade en el comunicado.
También quieren profundizar y ampliar la cooperación económica y financiera internacional con países africanos.
Reiteran su compromiso de apoyar la implementación y finalización de los acuerdos sobre la reforma del sector financiero.
Apoyan las recomendaciones del Consejo de Estabilidad Financiera para hacer frente a los puntos débiles estructurales de las actividades de gestión de activos.
El G20 también ha pedido a este organismo de estabilidad financiera que informe en julio de 2017 sobre los progresos realizados en su trabajo.
Seguirá observando los riesgos en el sistema financiero, incluidos los derivados de la denominada "banca en la sombra", que alude a aquellas entidades que realizan operaciones financieras que no están reguladas.
Los países del G20 quieren seguir trabajando para finalizar la regulación bancaria de Basilea III, que establece los requisitos de capital mínimo que deben tener los bancos para poder hacer frente a sus posiciones de riesgo.
Basilea III fue creado en diciembre de 2010 por el Consejo de Estabilidad Financiera y el G20 después del estallido de la última crisis financiera internacional de 2008.