
La Familia Real recibió el año pasado 378 regalos institucionales, 52 más que el año previo, en un ejercicio que en el caso de nuestro país estuvo marcado por la falta de Gobierno. Felipe VI fue el destinatario de la mayoría de esos obsequios relacionados con sus actividades oficiales. Recibió un total de 143, frente a los 98 de la reina Letizia, los 87 que recibieron en común o los 31 que destinados a la Princesa de Asturias y su hermana la Infanta Sofía.
El listado -que obedece a una normativa que entró en vigor a comienzos de 2015- incluye, entre otros, los regalos que sus Majestades recibieron del expresidente de Estados Unidos y de su esposa. El pasado 9 de julio Barack Obama regaló al Rey una cazadora de aviador personalizada. Michelle Obama obsequió a los monarcas con un mapa de Georgetown y de la ciudad de Washington de 1874.
Entre los regalos recibidos figuran desde un pin del Ayuntamiento de La Rinconada, al primer retrato monetario de Felipe VI, que recibió de la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre, con motivo de la audiencia a su presidente. El listado es, asimismo, un fiel reflejo de la agenda exterior del monarca, con otros tantos obsequios de líderes internacionales y de los principales organismos a escala global, como Naciones Unidas
Quejas por la opacidad
El mismo día que la Casa Real hacía públicos los regalos que recibió en 2016, el coordinador general de Izquierda Unida, Alberto Garzón, denunciaba en el Congreso de los Diputados la "opacidad" de la Monarquía cuando se cumplen mil días del reinado de Felipe VI. El diputado presentó una batería de preguntas por escrito dirigidas al Gobierno como parte de una campaña para denunciar el "límite" que implica esa opacidad para la calidad de la democracia.
Durante una rueda de prensa en el Congreso conjunta con el diputado Miguel Ángel Bustamante, ambos dirigentes denunciaron la falta de información sobre la fortuna del rey Juan Carlos I, dado que llegó a la Jefatura del Estado "con un brazo delante y otro detrás" pero según la prensa internacional la abandonó siendo "el tercer monarca más rico de Europa", alegaron.