
El dinero extra que los inversores piden por invertir en los bonos franceses frente a la deuda alemana se contrajo el jueves desde máximos de varios años después de que un pacto centrista de cara a las elecciones presidenciales francesas calmara las preocupaciones del mercado respecto a un posible avance de la extrema derecha que lidera Marine Le Pen.
François Bayrou, un influyente político centrista francés, decidió el miércoles no concurrir a las elecciones presidenciales y en lugar de esto forjar una alianza con el candidato Emmanuel Macron, una jugada que aumenta las posibilidades de este último en estos comicios tan disputados.
Los mercados ven con inquietud la postura eurófoba de Le Pen y las encuestas de esta semana que mostraban que había acortado distancias con sus rivales centristas han puesto a los inversores en guardia tras el éxito de las campañas populistas en las votaciones celebradas el año pasado en Reino Unido y Estados Unidos.
Las elecciones presidenciales francesas constan de dos rondas que se celebrarán en abril y mayo, respectivamente. El Frente Nacional de Le Pen previsiblemente llegará a la segunda vuelta, pero no logrará imponerse en este duelo final.
La decisión de Bayrou de apoyar a Macron ha relajado la presión sobre los maltrechos mercados de bonos franceses.
La rentabilidad del bono francés a diez años cayó 2,5 puntos básicos hasta un mínimo de una semana de aproximadamente 1 por ciento , ampliándose las caídas tras el anuncio de Bayrou el miércoles.
La distancia entre las rentabilidades de los bonos franceses y alemanes a diez años, un indicador de cómo perciben los inversores el riesgo relativo, se redujo a alrededor de 73 puntos básicos. La prima creció hasta los 84 puntos básicos a comienzos de semana, el nivel más alto desde finales de 2012.
"Los acontecimientos de ayer en Francia fueron positivos para los bonos franceses y un mayor apetito de riesgo", dijo Orlando Green, estratega de renta fija europea en Credit Agricole en Londres.