
El primer Gobierno de Mariano Rajoy no logró dejar los impuestos más bajos que cuando alcanzó el poder. Así se deduce de la Memoria de la Agencia Tributaria 2015, divulgada ayer, que pone de manifiesto cómo la rebaja fiscal del pasado año no logró compensar las subidas de tributos anteriores.
Solo en el impuesto de Sociedades, que se benefició de cambios en los pagos fraccionados y de la reinstauración de deducciones por gastos de amortización, el equipo de Rajoy puede anotarse el tanto de una rebaja, que aún así fue solo de apenas 145 millones. En el resto de tributos y en la cesta conjunta no sucede lo mismo.
En concreto, y según la citada memoria de la AEAT, el valor de la rebaja fiscal global aprobada para el año 2015 tuvo un coste para el Estado de 7.846 millones, muy lejos de los 23.259 millones de aumento de los ingresos registrados en el periodo 2012-2014, años en los que surtió el efecto de la subida del IVA y del IRPF y el establecimiento de tipos en los pagos a cuenta y la eliminación de múltiples deducciones en Sociedades.
La AEAT deja claro que el impacto de la rebaja del Impuesto de la Renta el año pasado restó ingresos por valor de 5.984 millones, cantidad insuficiente para contrarrestar los incrementos de los ejercicios precedentes (3.500 millones en 2012, 2.200 millones en 2013 y otros 339 millones en el año 2014).
El IVA fue el tributo que más subió
El IVA, sin embargo, es el tributo que más subió durante la primera legislatura de Rajoy, después de que en el primer año de Gobierno subieran los tipos general (del 18 al 21 por ciento) y reducido (del 8 al 10). Este impuesto ha sumado 10.000 millones más a las arcas públicas, con un efecto más notable tras la recuperación del consumo.
La fiscalidad medioambiental también se incrementó y sumó ingresos a la AEAT de casi 2.000 millones en la legislatura; y una mayoría de Especiales sumaron otros 3.000 millones en total.
Para neutralizar los efectos de todas las medidas fiscales de la legislatura, Rajoy tendría que haber bajado los impuestos en otros 15.413 millones, sin bien la necesidad de reducir el déficit público impidió esa opción. Fuentes de Hacienda, de hecho, han reconocido en varias ocasiones que la rebaja fiscal de 2015 "se pasó de frenada" pese a que logró su objetivo: "hacer que el PIB creciese con más intensidad".
Sociedades, de ida y vuelta
Se da la circunstancia de que el único tributo que bajó en los años de la primera legislatura, Sociedades, volverá a subir en cuanto el Ejecutivo confirme que el restablecimiento de tipos en los pagos a cuenta se prolonga en el tiempo.
Gracias a esa medida, aprobada el pasado mes de octubre, el Estado recaudará cerca de 10.000 millones más. Pese a que debe devolverlos el próximo mes de julio, si se prorroga el adelanto -y así ocurrirá- será entonces considerado una nueva subida de impuestos.