
La segunda reunión entre los equipos negociadores de PP y Ciudadanos -primera centrada en la economía y el empleo- evidenció que ambos equipos mantienen importantes discrepancias en una materia crucial para el acuerdo y para la estabilidad económica del país: las medidas para luchar contra el desempleo.
Tras la primera toma de contacto ayer, Ciudadanos admitió que les queda "mucho por hablar" para ponerse de acuerdo en materia de empleo, mientras el PP reconocía que, pese a las coincidencias, "también hay cosas que nos separan". Y es que después de la intensa negociación de ayer, que duró seis horas, el único consenso claro entre ambos partidos es la implantación en España de una medida similar a la denominada mochila austriaca como complemento para las pensiones.
Otros puntos, como el contrato único o la creación de un complemento salarial para las rentas más bajas, siguen alejando las posturas de ambos partidos. Desde la formación de Albert Rivera mantienen ambas reivindicaciones para llegar a un pacto que, recuerdan, será un todo o nada. "Si no llegamos a un consenso en todos los puntos no habrá acuerdo", remarcan desde el equipo negociador de Ciudadanos.
Una circunstancia que hace que los detalles salgan a cuentagotas. Los representantes de los equipos negociadores del PP y C's no quieren dar pistas de la letra pequeña de la negociación, que continuará hoy a partir de las 11 para continuar con el bloque económico y empezar con el social. Fuentes de ambas formaciones consultadas por este periódico insisten en que no tiene sentido informar de los avances hasta que se llegue al pacto final.
Es una breve declaración durante un receso tras la primera parte de la reunión de ayer, representantes de ambos partidos se mostraron positivos. Por parte del PP, el vicesecretario de Organización del PP, Fernando Martínez Maíllo, destacó "coincidencias importantes en materia económica", aunque también, admitió, "cosas que nos separan". En todo caso, el mensaje de los populares se resumió en que "no hay obstáculos insalvables".
En el lado de las coincidencias en materia de empleo, si hay una medida en la que parecen estar de acuerdo ambos partidos es pactar para España un sistema similar a la mochila austriaca. Se trata de una de las reivindicaciones estrella de Ciudadanos, el PP ya la incluyó en su oferta de 150 puntos para conseguir apoyos de otros partidos para gobernar, y fue uno de los puntos más destacados del programa laboral del pacto que rubricaron en febrero PSOE y C's de cara al intento de investidura de Pedro Sánchez.
La mochila austriaca es en realidad un fondo de capitalización para los trabajadores que se va llenando con la aportación mensual de la empresa de una cantidad del salario bruto del empleado. Esa hucha puede trasladarse de trabajo en trabajo y se usa para costear parte de la indemnización en caso de despido o se acumula para la jubilación si no se ha usado antes.
Se trata, por tanto, de una medida que incide tanto en el coste que tienen que afrontar a las empresas cuando hacen un despido como en el sistema de pensiones.
Atajar la dualidad
El trabajo en los primeros días se centrará en el bloque de "crecimiento económico, competitividad y empleo". Aunque sin concretar, el secretario general del grupo parlamentario de Ciudadanos, Miguel Gutiérrez, advirtió que queda mucho trabajo por hacer porque su partido se mantiene firme en la "aspiración" de acometer una modificación "sustancial" de los tipos de contrato. De hecho, es uno de los puntos sobre los que están "hablando"y "discutiendo".
En ese sentido, fuentes cercanas a la negociación del partido de Rivera apuntan que el objetivo irrenunciables es "atajar la dualidad en el mercado de trabajo". En concreto, el programa de C's defiende la figura del contrato único "estable e indefinido, que proteja a los trabajadores y ayude a acabar con la precariedad laboral". Aunque esas mismas fuentes señalan que es pronto para decir cómo se moldearía esa reivindicación en el acuerdo con el PP, puede servir como referencia el acuerdo de febrero con el PSOE. En esta ocasión, Rivera renunció al contrato único a cambio de reducir las modalidades a tres: indefinido, temporal y de formación, y de incluir la indemnización creciente en el modelo temporal.
Gutiérrez precisó que la reforma laboral no son solo esos modelos de contrato, sino muchos otros aspectos "ligados", como la mencionada mochila austríaca o los complementos salariales a través del IRPF para las rentas más bajas.
Esta última propuesta tampoco gusta en el PP por su elevado coste. Aunque en Ciudadanos admiten que hay que tener en cuenta las limitaciones presupuestarias, consideran la medida "clave" en materia social. El partido de Rivera ya reformuló a la baja esta propuesta para el 26-J porque implantarla superaba los 7.800 millones de euros.