Finalmente y tras una larga espera, el programa para salvar al sistema financiero de Estados Unidos se convierte en realidad. Republicanos y demócratas han llegado a un acuerdo sobre las condiciones.
El plan cuyo presupuesto serán 700.000 millones de dólares servirá para comprar los activos financieros expuestos a la crisis.
Así lo ha afirmado el jefe de los negociadores republicanos, Judd Gregg, quien señaló que el lunes será firmado por las dos Cámaras. Lea la noticia completa