Grecia registró un superávit primario de 1.884 millones de euros en el primer semestre del año, frente al déficit primario de 1.235 millones de euros previsto en los presupuestos generales, fruto de una fuerte reducción del gasto público, según datos publicados hoy por el Ministerio de Finanzas.
Los ingresos directos del Estado ascendieron a 19.799 millones de euros, 1.657 millones menos que los 21.456 millones de euros inicialmente previstos en la ley de presupuestos.
Los gastos alcanzaron los 23.242 millones de euros, 4.090 millones menos que los 27.332 millones presupuestados. Se trata de los datos revisados por el ministerio, después de que hace quince días se publicasen las cifras provisionales.
Las inversiones públicas se limitaron a 1.154 millones de euros, casi la mitad de los 2.200 millones previstos en los presupuestos del Estado. Los ingresos derivados de fondos europeos se situaron en los 1.762 millones de euros, 712 millones más de lo previsto inicialmente.
Este resultado se debe al "ajuste del gasto debido a la situación especial de liquidez" que atraviesa el país, destacó el ministerio en un comunicado, y precisó que "una vez (la situación de) la liquidez se normalice el gasto aumentará al nivel previsto en los presupuestos".
