
Dicen que las comparaciones son odiosas y, en este caso, la frase hecha adquiere todo el sentido. El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, trató de enfrentar las cifras de deuda pública de Grecia y España para hacer énfasis en el abultado endeudamiento heleno. Sin embargo, los datos que aportó estaban desacertados: la cifra de lo que debe España es mayor de lo que dijo el jefe del Ejecutivo, al igual que la que de Grecia.
Hablando sobre la actual situación de Grecia y preguntado sobre la posibilidad de que el país no cumpla con los compromisos financieros adquiridos, Rajoy afirma que en Grecia "deben mucho dinero, algo más del 90% de su PIB" y apuntilla, como ejemplo, que "es como si en España debiéramos 900.000 millones de euros, que es una cifra astronómica".
Ni el presentador que le estaba haciendo la entrevista, Pedro Piqueras, ni el propio Rajoy, fueron conscientes de los errores y siguieron adelante con la conversación. "No seré yo quien diga que Grecia no va a pagar su deuda", asegura el jefe del Ejecutivo.
Pero lo cierto es que la deuda pública española es superior a la cifra calificada por el presidente del Gobierno como "astronómica". En concreto, de acuerdo con los últimos datos publicados por el Banco de España, al cierre del primer trimestre del año la deuda del conjunto de las administraciones públicas ascendía a 1,046 billones de euros, lo que equivale al 98% del PIB. Es más, las previsiones apuntan a que la deuda de España terminará 2015 rebasando la barrera del 100% del PIB.
También la deuda de Grecia es muy superior a lo mencionado por el jefe del Ejecutivo. Los datos más recientes ofrecidos por Eurostat, la oficina de estadísticas europea, del cuarto trimestre de 2014 la sitúan en 317.100 millones de euros, el 177,1% del PIB del país heleno, no el 90% como alega Rajoy.