
El "No" en el referéndum de Grecia aumenta dramáticamente el riesgo de una salida desordenada de Grecia de la eurozona, según advierten los expertos de Fitch Ratings. De acuerdo a las estimaciones de la agencia de calificación estadounidense "todavía es posible un acuerdo entre Grecia y sus acreedores oficiales" pero asegura que el tiempo apremia y el riesgo de errores político o que las dos partes simplemente no se pongan de acuerdo, "es alta".
Para Fitch, la renuncia del ministro de Finanzas, Yannis Varoufakis, es una señal que indica el deseo del gobierno griego de regresar a las negociaciones cons acreedores oficiales. Sin embargo, según señala la agencia de rating en un comunicado, suponiendo que ambas partes regresen a la mesa de negociaciones, "es probable que los acreedores no hagan grandes concesiones", especialmente en materia de las políticas económicas a implementar en el país.
De hecho Fitch estima que las propuestas que proponga el Eurogrupo podrían "ser inaceptables" para el gobierno de Alexis Tsipras que en estos momentos se encuentra "envalentonado" por el resultado del referéndum del domingo. La falta de progreso y la pérdida de confianza en lo que va de año son razones suficientes para que Fitch considere "difícil" encontrar un acuerdo limitado antes del próximo 20 de julio, cuando vencerán alrededor de 3.500 millones de euros en bonos griegos.