
Las tres comunidades autónomas que ya en los dos primeros meses del año mostraron problemas para ceñirse al objetivo de déficit (Extremadura, Cantabria y Castilla-La Mancha) parece que van a cambiar de manos. Los resultados del 24 de mayo hacen pensar que Monago será sustituido por Fernández Vara, Ignacio Diego por Revilla y Cospedal por García Page. Los tres tendrán que tomarse en serio el objetivo de déficit del 0,7% del PIB marcado para este año ya que en los dos primeros meses del año ya se estaban desviando.
Fernández Vara será el que más difícil lo tendrá ya que no sólo tendrá que convencer a Podemos para ser investido, sino también porque Monago dejó la comunidad con un déficit del 0,40% del PIB. Esta cifra deja un margen de sólo 0,3 puntos para los otros 10 meses del año, lo que podría obligar a Vara a hacer nuevos ajustes o retrasar algunas de sus propuestas para evitar superar el tope del 0,7% del PIB marcado por Montoro.
Por su parte, Diego, que podría ser sustituido por su predecesor, el regionalista Miguel Ángel Revilla, también deja a su comunidad en una situación financiera complicada. En los dos primeros meses del año, su déficit ascendía al 0,26% del PIB, lo que, como pasa en Extremadura, podría obligar a cambiar alguna de sus propuestas al nuevo gobierno para evitar superar a final de al el 0,7% del PIB previsto.
Cospedal deja en dificultades a Page
La tercera comunidad con dificultades, que probablemente también cambiará de manos, es Castilla-La Mancha. Allí, Cospedal, a quien su reforma electoral le ha jugado una mala pasada, deja a su comunidad con un déficit del 0,19% del PIB hasta febrero. Así, García Page apenas podrá elevar esta cifra en medio punto para no superar el tope establecido por Hacienda.
Los siguientes que dejaron con más déficit a su comunidad son Rudi (Aragón), Herrera (Castilla y León) y Garre (Murcia). En los tres casos, el desajuste presupuestario ascendía al 0,17% del PIB en febrero, lo que deja un margen de poco más de medio punto para el resto del año. En el caso de Herrera, todo indica que su sucesor será él mismo, aunque sin mayoría absoluta, así que no podrá recurrir a la famosa herencia recibida si finalmente supera la barrera exigida para todo el año.
Por su parte, Pedro Antonio Sánchez, que se postula como nuevo presidente de Murcia con el permiso de Ciudadanos, tampoco podrá quejarse mucho ya que su predecesor, Alberto Garre, es de su mismo partido, el PP. Por el contrario, el socialista Lambán, que podría sustituir a Rudi en el Gobierno de Aragón si recibe el voto de Podemos, sí podrá quejarse de la famosa "herencia recibida".