
El nuevo diseño del programa del Imserso, que prioriza los hoteles de cuatro estrellas y congela las tarifas para los usuarios, ha provocado malestar entre el gremio de los hoteleros. Ya la semana pasada, cuando se supo la noticia denunciaron por medio de su patronal (Cehat) que se trataba de una medida "irresponsable".
Esta semana han dado una nueva vuelta de tuerca, y han reclamado al Imserso una compensación por la congelación de las tarifas. En concreto, proponen que los beneficiarios del programa aporten un euro diario. "Los jubilados españoles que viajan tienen capacidad económica para asumir entre 7 y 14 euros más por paquete", explica Juan Molás, presidente de la patronal, en declaraciones a Cinco Días.
En concreto, el coste para los usuarios de este programa, destinado a mantener el empleo y la actividad en el sector durante la temporada baja, oscila entre los 20,5 y los 21,5 euros para los destinos de la costa peninsular y Baleares.
Precios "fuera de mercado"
Estos precios, según la patronal, obliga a los hoteles de cuatro estrellas a trabajar en cifras que están fuera del mercado, y que suponen "cuantiosas pérdidas para el sector". De hecho, algunos hoteleros se plantean abandonar el programa. Además, critica la penalización a los hoteles de tres estrellas, "que han sido los que han mantenido el programa durante 30 años".
Molás advirtió al director general del Imserso, César Antón, que mantener su postura podría suponer una importante pérdida de empleos. "Por cada siete plazas que se ocupan se genera un puesto de trabajo", explica el presidente de Cehat. De esta manera, las 938.000 plazas ofertadas para este ejercicio podrían generar unos 120.000 empleos, muchos de los cuales se verían amenazados.
El Imserso se defiende
Por su parte, desde el Imserso defienden que no se penaliza a los hoteles de tres estrellas, y que desde hace diez años ya se viene valorando a los hoteles de más valoración.
"Incluso, en este último procedimiento los pliegos contemplan la valoración del conjunto de la oferta hotelera, no como en los anteriores en los que solo y exclusivamente se valoraban los hoteles de más de 3 estrellas", asegura el organismo en una nota aclaratoria hecha pública en su página de Facebook.
Desde el organismo se asegura que lo que se pretende "es primar la mejor oferta". Así incluso sin presentar ningún hotel de más de 3 estrellas, por parte del licitador este obtendría puntuación, cuando en anteriores concursos hubiera tenido por esta variable 0 puntos.
En cuanto a los precios, explica que fija unos precios de venta al público para las dos temporadas próximas, pero no fija el coste concreto de cada paquete que vendrá en función de los cálculos que realice el licitador, tomando en cuenta la financiación global del Imserso y la aportación de los usuarios.
Además, aclara que el Programa pretende ofrecer vacaciones a precios reducidos a las personas mayores y que con las actuales circunstancias cualquier modificación en el precio para los usuarios podría traer consecuencias negativas en la ocupación de las plazas, "lo que traería consigo una bajada notable de la actividad económica y del mantenimiento del empleo".