Desde el Gobierno defienden la prisión permanente como algo "socialmente aceptado" en España, mientras los socialistas se esfuerzan en explicar su apoyo al acuerdo pero su rechazo a la cadena perpetua
Tras la firma del pacto antiterrorista y su posterior registro ayer en el Congreso de los Diputados llegó el turno de las explicaciones ante un acuerdo que partía de un escollo importante: la inclusión o no de la prisión permanente revisable. Finalmente, se optó por una fórmula intermedia, en la que el término "prisión permanente revisable" para los delitos con resultado de muerte se ha sustituido por el de "pena máxima privativa de libertad recogida en el Código Penal".
Lo cierto es que rodeos aparte esa pena máxima será la prisión permanente revisable en cuanto se apruebe el nuevo Código Penal, que ya está tan sólo a falta de su tramitación en el Senado.
El matiz introducido, sin embargo, es que el acuerdo antiterrorista no incluye cuantía de penas y se mantendrá por encima de las modificaciones de la legislación. Eso ha sido lo que ha terminado de convencer al PSOE, que insiste en su apoyo al pacto pero su rechazo a la prisión permanente. Durante la josrnada de ayer, los diputados socialistas se esforzaron por hacer pedagogía de ese aspecto para dejar clara su postura. De hecho, el portavoz socialista en el Congreso, Antonio Hernando, anunció ayer que recurrirán la medida ante el Tribunal Constitucional al día siguiente de su publicación en el BOE. Su apoyo al pacto, aseguran, va más allá de "intereses partidistas" y obedece al "sentido de Estado" de Pedro Sánchez, declaró Hernando. El diputado socialista ha asegurado además que "no hay ninguna otra posibilidad de pacto con el PP en otros temas", ya que sus programas son "antágonicos".
Aceptación social
Para el Gobierno el pacto sitúa a España ?en el liderazgo mundial en la lucha contra el terrorismo yihadista?, según valoró ayer el ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz. En su comparecencia en el Congreso estuvo acompañado por el ministro de Justicia, Rafael Catalá, que preguntado por la prisión permanente defendió que se trata de una institución "socialmente aceptada en España" y que cuenta con el "apoyo y aval" de todos los órganos del Estado.
Una aceptación que sin embargo no termina de reflejarse en la Cámara Baja. IU y UPyD han expresado públicamente su rechazo al acuerdo. Para el coordinador de IU, Cayó Lara, con el pacto "Rajoy ha colado la cadena perpetua por la puerta de atrás". A pesar de las críticas, fuentes de ambos partidos esperan un consenso más amplio y aseguran que algunas formaciones le han trasladado en privado que apoyan el pacto aunque no lo hayan firmado.
En este contexto, hoy se conocerá la encuesta con estimación de voto del CIS, a menos de dos meses de las elecciones andaluzas y con la incógnita de la evolución de Podemos.