Según publica la agencia Associated Press, decenas de hispanos acuden hoy a las urnas desencantados ante la falta de avance político, especialmente en lo referido a la reforma migratoria.
"Todo es un juego político. Es una lucha entre demócratas y republicanos, pero quien sale perjudicado es el pueblo", opinó Germán Quintero, un colombiano de 80 años que votó en Queens junto a su esposa Graciela, de 74.
Con resignación los hispanos votaron sin aglomeraciones ni filas en escuelas públicas de los cinco condados de la ciudad para escoger gobernador, procurador general y representantes a la cámara baja, entre otros puestos.
Muchos aseguraron que siguen siendo fieles al Partido Demócrata a pesar de su decepción por los altos impuestos y la falta de una reforma que garantice algún tipo de ayuda a inmigrantes que residen en el país ilegalmente.
"Todo es un juego político. Es una lucha entre demócratas y republicanos, pero quien sale perjudicado es el pueblo", opinó Germán Quintero, un colombiano de 80 años que votó en Queens junto a su esposa Graciela, de 74.
Con resignación los hispanos votaron sin aglomeraciones ni filas en escuelas públicas de los cinco condados de la ciudad para escoger gobernador, procurador general y representantes a la cámara baja, entre otros puestos.
Muchos aseguraron que siguen siendo fieles al Partido Demócrata a pesar de su decepción por los altos impuestos y la falta de una reforma que garantice algún tipo de ayuda a inmigrantes que residen en el país ilegalmente.