
El Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) se incrementó un 3,8% interanual hasta agosto, lo que supondría un descenso respecto al alza del 4% que experimentó el Índice de Precios de Consumo (IPC) en julio. Sin embargo sería la tasa de inflación más alta registrada en un mes de agosto desde 1995, cuando se sitúo en el 4,3 por ciento.
La inflación anual estimada del Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) en agosto de 2006 se situó en el 3,8%, de acuerdo con el indicador adelantado elaborado por el INE. Este indicador proporciona un avance del IPCA que, se conocerá el 13 de septiembre y que, en caso de confirmarse, supondría una disminución de dos décimas en su tasa anual, ya que en el mes de julio esta variación fue del 4,0%.
El INE elabora este indicador con el objetivo de incorporarlo al cálculo del índice adelantado del IPCA de la Unión Monetaria Europea (UME) que publica Eurostat. La obtención de este indicador avance de la UME forma parte de la política de Eurostat y del Banco Central Europeo de ofrecer datos equiparables en tiempo y calidad con los producidos por los Estados Unidos.
El IPC de julio aumentó un 4%
El IPCA adelantado contrasta con el Indice de Precios de Consumo (IPC), que cayó seis décimas, pero la tasa interanual (últimos doces meses) se elevó hasta el 4%, una décima más que en el mes anterior, según los datos hechos públicos por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Hasta julio, el IPC acumulaba una subida del 1,7%.
La inflación subyacente (que no incluye los precios de los productos energéticos ni de los alimentos no elaborados) se incrementó en julio una décima en tasa interanual, hasta el 3,1%, con lo que la diferencia respecto al índice general continúa en nueve décimas. Por su parte, el Indicador de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) mantuvo su tasa anual en el 4%.
La caída de seis décimas de la inflación en julio respecto al mes anterior se debió, principalmente, al descenso del 11% de la rúbrica de vestido y calzado, como consecuencia de las rebajas de verano, así como a la reducción de precios de los productos de menaje, que experimentaron una caída del 0,6%, derivada también de las rebajas.
En el grupo de alimentos, destaca el descenso mensual del 1,6% de aceites y grasas, y la caída del 0,6% de los crustáceos, moluscos y preparados de pescado.
Subida de transportes y carburantes
Por el contrario, entre los grupos que experimentaron los mayores aumentos de precios en tasa mensual se encuentra la rúbrica de transporte, cuyos precios aumentaron un 0,8%, por el encarecimiento de los carburantes y lubricantes. Los precios de hoteles, cafés y restaurantes aumentaron, por su parte, un 0,9%, como consecuencia de la subida de los alojamientos turísticos en los meses de verano.
También aumentaron en julio respecto al mes anterior los precios de los alimentos y bebidas no alcohólicas, con un aumento del 0,4% derivado del alza de los precios de las carnes de ave, ovino y porcino y de la leche, así como la rúbrica de ocio y cultura, cuyos precios se incrementaron un 1,2%, debido al encarecimiento de los paquetes turísticos en verano.