La balanza por cuenta corriente -que mide las transacciones monetarias entre España y el resto del mundo- acumuló entre enero y junio un déficit de 9.900 millones, casi diez veces superior a los 1.000 millones registrados un año antes. El mayor déficit comercial, debido al menor tirón de las exportacionesl, fue clave del aumento del desfase.
Según los datos publicados hoy por el Banco de España, esta evolución refleja principalmente el incremento de los déficit de la balanza comercial y de la balanza de rentas. Por el contrario, se produjo un aumento del superávit de servicios, mientras que el saldo de transferencias corrientes se mantuvo estable.
En concreto, el déficit acumulado de la balanza comercial en el primer semestre de 2014 se situó en 9.000 millones de euros, casi el triple que un año antes. La balanza de rentas también contribuyó a engordar el déficit por cuenta corriente, ya que su desfase se elevó de 7.700 millones de euros en el primer semestre de 2013 a 12.700 millones en el de 2014. Las transferencias se mantuvieron estables.
La balanza de servicios, por el contrario, amplió su superávit hasta junio al situarlo en 14.500 millones de euros, un 3,5% más que hace un año. El buen tono del turismo, que elevó sus ingresos hasta los 32.800 millones de euros en los seis primeros meses del año, fue clave de esta mejoría.
Salidas de capital por 6.000 millones
Por su parte, la cuenta financiera arroja un déficit de 6.000 millones de euros, lo que significa que los extranjeros han sacado ese importe de España. Hace un año, se contabilizaban entradas netas de capital por 39.803 millones.
A pesar de este saldo negativo, la tendencia es a la mejoría ya que junio fue el segundo mes consecutivo en el que los extranjeros invirtieron en España. En concreto, inyectaron 6.700 millones de euros en junio, cifra que multiplica por más de cuatro la de mayo, que fue de 1.600 millones de euros, según los datos de la balanza de pagos publicada este viernes por el Banco de España.
Se duplica el déficit comercial
