
El informe del grupo de expertos sobre la reforma fiscal propone como medidas estrella una rebaja del IRPF y del impuesto de Sociedades combinada con la reclasificación de los productos con IVA reducido al tipo general del 21%. Consulte aquí el informe completo de los expertos (.pdf)
Los expertos dirigidos por el profesor Manuel Lagares propone reducir a cuatro tramos el impuesto sobre la renta de las persona físicas (IRPF). El tipo mínimo debería situarse entre el 19% y 20%, frente al 24,75% actual. El tipo máximo no debería superar el 50%, en la actualidad está en el 52% aunque en algunas CCAA puede llegar a ser más alto.
Quedarían exentas las rentas inferiores a 12.000 euros anuales y, paulatinamente, el tipo máximo medio debería acercarse a la media de la zona euro, que fue del 43,7% en 2013.
El ahorro tiene en la actualidad tres tramos impositivos: del 21% para las ganancias hasta 6.000 euros, del 25% hasta 18.000 euros y del 27% a partir de esta cifra, los 6.000 primeros euros están exentos. Lo que propone el comité es aplicar un tipo único al ahorro que coincida con el tipo mínimo -en torno al 19% y el 20%-.
Además, la comisión presidida por Manuel Lagares aboga por elevar "significativamente" la cuantía de los mínimos personales para favorecer principalmente a las familias con hijos o ascendientes a su cargo, de tal manera que la rebaja de la tarifa del IRPF atienda más las circunstancias personales de los ciudadanos, con un aumento de la igualdad entre quienes tienen niveles similares de renta y una mayor progresividad.
Los expertos mantienen, en cambio, el tratamiento fiscal de los fondos de pensiones, pero sí piden extender su trato favorable a las cuentas de ahorro a largo plazo, con el fin de incentivar el ahorro-previsión.
El comité aboga por suprimir las exenciones fiscales por dividendos y participaciones en beneficios con el límite de 1.500 euros anuales, ya que entienden que no responden a ninguna causa o motivación fiscalmente protegible.
Las indemnizaciones deben tributar
El documento de más de 400 hojas elaborado por el grupo de expertos recomienda que los trabajadores tributen en el IRPF por las indemnizaciones en caso de despido en contratos indefinidos, tanto si este es improcedente como si se justifica por causas económicas.
Los expertos distinguen entre contratos temporales e indefinidos. Creen que "las indemnizaciones cuando se perciben por esta causa (despidos basados en causas económicas como permite la última reforma laboral) no deberían estar exentas del IRPF, porque esa pérdida ya está definida".
Más productos al IVA del 21%
Para el IVA, los expertos no son partidarios de subir el tipo general y quieren que se mantenga en el 21%. Pero sí que abogan por una reclasificación de los bienes y servicios. Piden que los productos que tributan al 10% pasen al 21%, a excepción de hostelería, transporte público y vivienda. Una medida que no debe ser inmediata, sino que el grupo de expertos pide que se haga en el medio plazo.
Al analizar este impuesto, los expertos han centrado sus esfuerzos en los bienes y servicios sujetos actualmente al tipo reducido, "al objeto de proponer su tributación al tipo general, pero planteando ciertas excepciones motivadas por claras razones de política económica", señala el informe.
Sobre los servicios turísticos, la comisión tampoco considera adecuada su tributación al tipo general, "pues perjudicaría gravemente la competitividad de este sector, ya que los principales países competidores de España siguen manteniendo un tipo reducido para el gravamen de las actividades turísticas".
"Desde luego la comisión considera deseable plantearse, como objetivo a medio plazo, mover los bienes y servicios sometidos a los tipos reducidos y superreducidos hacia el tipo general, pero considera que el incremento de los tipos superreducidos, aplicables a esos bienes de primera necesidad, no resulta deseable salvo que al mismo tiempo se pudieran articular mecanismos de compensación a través de prestaciones a las rentas más bajas", indica.
En cuanto a los tipos superreducidos, recuerdan que se aplican en el caso español esencialmente a bienes de primera necesidad, y en particular a alimentos, por lo que "su incremento afectaría muy negativamente a los segmentos de población económicamente más vulnerables".
Rebajas en Sociedades
En la reforma del sistema tributario español propone reducir el tipo nominal del Impuesto de Sociedades desde el 30% actual, que se encuentra entre los más elevados de los países del entorno, hasta alrededor del 20%.
Los expertos creen que esa reducción debería efectuarse por etapas, con una posición intermedia situada en torno al 25%. En paralelo, creen que debería surpimirse el régimen especial de las empresas de reducida dimensión existente hoy, "pues suele tener efectos muy negativos sobre la productividad, dado que supone un desincentivo para el crecimiento de las empresas, lo que les impide beneficiarse de las economías de escala".
En relación con las deducciones, la comisión propone establecer una tributación mínima en el régimen de exención para evitar la doble imposición internacional por el impuesto extranjero que grave a la entidad participada. Esta tributación mínima podría fijarse a través del nivel del tipo impositivo, pudiendo servir de referencia el tipo más bajo del Impuesto sobre Sociedades en la Unión Europea, que se sitúa en el 10%.
Se propone, además, la supresión de la deducción por actividades de investigación y desarrollo e innovación tecnológica, la deducción por inversión de beneficios, por inversiones medioambientales, por reinversión de beneficios extraordinarios y por creación de empleo, entre otras de menor cuantía, "por considerarlas poco eficientes para el logro de los objetivos que persiguen y suponer, sin embargo, un importante coste recaudatorio".
Eliminar patrimonio y sucesiones
En el caso del impuesto sobre el patrimonio, los expertos abogan por su eliminación "siguiendo la tendencia que se aprecia en otros países desarrollados y dados sus efectos negativos sobre el ahorro y sus reducidas recaudaciones".
En su opinión, la experiencia ha demostrado que el impuesto sobre el patrimonio acaba recayendo principal y únicamente sobre la propiedad inmobiliaria, "convirtiéndose así en un Impuesto sobre Bienes Inmuebles bis".
Por otra parte, la comisión de expertos propone mantener el impuesto sobre sucesiones y donaciones pero creando una tributación mínima por sucesiones en todo el territorio nacional y cuya cuantía debería situarse en el entorno de unos 20.000 o 25.000 euros. "Ese mínimo de exención sería el que proporcionase progresividad a la tarifa lineal del gravamen", explica.
Además creen que deberían establecerse solo tres grupos de grados de parentescos: grupo A integrado por cónyuge, ascendientes y descendientes por línea directa, adoptados y adoptantes; grupo B integrado por parientes colaterales de segundo y tercer grado y parientes por afinidad hasta el tercer grado; y grupo C integrado por cualquier otra persona no incluida en los grupos anteriores.
Acabar con la deducción por vivienda
El presidente de la comisión sobre la reforma fiscal, Manuel Lagares, ha propuesto acabar en un plazo "razonable" de entre 5 y 10 años con la vieja deducción por adquisición de vivienda.
El informe indica que entre los motivos para acabar con esta deducción está el hecho de que constituye una causa importante, "como se señala por los organismos internacionales", para no reducir el endeudamiento con mayor rapidez incluso disponiendo de fondos suficientes para ello, sino hacerlo anualmente solo hasta el límite fiscalmente permitido para esa deducción.
La comisión apuesta por impulsar un nuevo impuesto sobre bienes inmuebles (IBI), que gravaría anualmente el valor patrimonial de todos los bienes inmuebles, tanto rústicos como urbanos, situados en territorio de régimen común. Este gravamen, que recaería sobre valores patrimoniales y no sobre rendimientos, debería ser "algo inferior" al 1% del valor catastral del inmueble.
Informe no vinculante
Aunque encargado por el ministerio de Hacienda, el informe no tiene carácter vinculante y la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Saénz de Santamaría, anunció apenas horas después de recibirlo que algunas de las propuestas más complicadas electoralmente no verán la luz.
Un ejemplo ha sido la idea de gravar en el impuesto sobre la renta la vivienda habitual. La vicepresidenta ha asegurado en la rueda de prensa posterior al consejo de Ministros que el Gobierno no aplicará esta recomendación.