La deuda de las familias cayó un 4,3% en el mes de febrero, hasta alcanzar los 823.494 millones de euros, frente a los 861.035 millones registrados un año antes, con lo que el endeudamiento de los hogares se sitúa en el nivel más bajo desde mayo de 2007, previo a la crisis, según datos del Banco de España.
En relación con el mes anterior, el saldo deudor de las familias se redujo en febrero en 5.237 millones. En enero, la deuda menguó en más de 5.000 millones y en diciembre en más de 8.000 millones como consecuencia del traspaso de activos inmobiliarios y préstamos de las familias al denominado banco malo.
El impacto del crédito
La deuda de los hogares se vio especialmente afectada por el retroceso de los créditos al consumo, que descendieron un 6,2% en febrero y se situaron en 185.143 millones de euros.
También retrocedió la deuda hipotecaria, un 3,8% interanual, hasta alcanzar los 635.315 millones de euros. Este importe supone el 77,1% del endeudamiento total de los hogares.
Esta proporción se mantiene desde hace varios años, ya que la caída de la inversión en vivienda ha sido paralela a la del endeudamiento total, por lo que el importe que las familias destinan a su hogar ocupa la mayor parte de su ahorro.
¿Y las empresas?
La deuda de las empresas también bajó en el segundo mes del año, hasta los 1,120 billones de euros, un 10,6% menos que hace un año y el nivel más bajo desde junio de 2007, mientras que en relación a enero se anotó un descenso del 1,42%.
La caída interanual de este saldo se explica por el descenso de los préstamos de entidades de crédito residentes y los préstamos titulizados fuera de balance, que se redujeron un 14,2%, hasta los 712.810 millones de euros.
En cambio, los valores distintos de acciones crecieron un 7,2% en febrero en tasa interanual, hasta los 72.759 millones, mientras que los préstamos al exterior bajaron un 5,5% en relación a febrero de 2012, hasta los 335.322 millones de euros.