Ascienden a 50 los despidos comunicados desde que Damm y Cobega controlan la firma
BARCELONA, 28 (EUROPA PRESS)
La nueva Cacaolat, capitaneada por Damm y Cobega, ha comunicado a la plantilla el despido de 24 trabajadores, de los que 18 serán "inmediatos" --este jueves se enviarán las cartas a los empleados-- y otros seis se producirán en la segunda quincena de marzo.
Así lo han explicado a Europa Press fuentes del comité de empresa de la firma catalana de batidos, que han indicado que la dirección comunicó el miércoles el despido de estos 18 trabajadores, de los que 14 pertenecen al centro de Parets del Vallès (Barcelona) y los otros cuatro al de la calle Pujades de la capital catalana, que emplean a cerca de 300 personas.
Se trata de trabajadores de rutas de distribución, administración y comercial, si bien todavía no se ha comunicado la procedencia de los empleados que causarán baja en marzo.
Fuentes de Cacaolat han explicado a Europa Press que se trata de un proceso de "reestructuración y adaptación a la demanda del mercado", por lo que se han cerrado muchas rutas comerciales que anteriormente estaban operativas cuando también se distribuía Letona.
Han añadido que la cifra de 24 despidos no está cerrada y podría variar, puesto que la dirección está en negociaciones con los sindicatos con el objetivo de que esta reestructuración "tenga el menor impacto posible y alcanzar un consenso".
El comité de empresa tiene previsto reunirse este viernes para decidir si la plantilla realiza movilizaciones o convoca una huelga en señal de protesta a este planteamiento de reducir el equipo, puesto que los despidos comunicados este miércoles se suman a los 24 que ya se ejecutaron en octubre, con lo que ya se alcanzaría una cincuentena de despidos.
JUICIO
Fuentes sindicales han señalado que el día 11 de marzo se celebrarán dos juicios en el Juzgado Social número 25 de Barcelona después de que cuatro trabajadores de Cacaolat demandaran de forma individual a la firma catalana por despido improcedente en octubre.
Cacaolat justificó entonces los despidos, según las cartas que envió a los trabajadores y a las que tuvo acceso Europa Press, al considerar que la plantilla está sobredimensionada, si bien el consorcio se comprometió a mantener la totalidad de los puestos de trabajo cuando se hizo con la adjudicación.
También argumentó que se había producido una caída de las ventas: mientras en 2010 se registraron 88 millones con un beneficio de alrededor de 4,6 millones, el 2011 se cerró con una facturación de 33 millones y pérdidas de 5,7, y Cacaolat auguraba que las ventas se situarían en 2012 sobre los 38 millones y las pérdidas superarían los cinco millones.
La firma catalana de batidos también alegó que la plantilla y la producción anterior correspondía no sólo a los productos Cacaolat, sino a los derivados de empresas del grupo Nueva Rumasa que actualmente no existen, así como a un recorte de artículos del catálogo, que ha pasado de 450 referencias a unas 70 actuales.
El Juzgado Mercantil número 6 de Barcelona adjudicó en noviembre de 2011 la unidad productiva de Cacaolat a la alianza formada por Damm (49%), Cobega (49%) y Victory Turnaround (2%), que llevará a cabo una inversión de más de 130 millones de euros que se dirigirán a la innovación y a nuevos sistemas de comercialización y métodos de organización.