El expresidente de la CEOE Gerardo Díaz Ferrán y los otros ocho detenidos en la Operación Crucero, en la que se investiga el supuesto vaciamiento patrimonial del Grupo Marsans para evitar el pago a sus acreedores, pasarán mañana, miércoles, a disposición del juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco, informaron fuentes jurídicas. La acusación pide prisión eludible bajo fianza para Blesa por riesgo de fuga.
El titular del Juzgado Central de Instrucción número 6, que instruye este procedimiento a partir de una denuncia presentada en febrero pasado por las mayoristas AC Hoteles, Meliá, Pullmantur y el grupo Orizonia, podría imputar a los detenidos los delitos de alzamiento de bienes, blanqueo de capitales e insolvencia punible.
En la operación también han sido detenidos el empresario Ángel de Cabo, que compró Marsans a través de la empresa Posibilitum; su colaborador Iván Losada Castell, consejero delegado de Nueva Rumasa; la secretaria de este último, Susana Mora; y Teodoro Garrido, cuñado de De Cabo.
Además de realizar ocho registros en domicilios particulares y sedes sociales del entramado, el Cupero Nacional de Policía arrestó a Rafael Tormo, Antonio García, Carmelo José Estellez Giménez; y José Enrique Pardo Manrique, que habrían actuado como supuestos testaferros de De Cabo.
Paraísos fiscales
El juez investiga si Díaz Ferrán y su socio Gonzalo Pascual, que falleció en junio pasado, utilizaron las empresas de De Cabo para evadir el patrimonio de Marsans a paraísos fiscales y no pagar las deudas con los acreedores, que las mayoristas denunciantes cuantifican en 45 millones de euros.
Para investigar el rastro de las posibles transacciones financieras y determinar si los detenidos tienen activos inmobiliarios en el extranjero, el juez tiene previsto cursar comisiones rogatorias a Liechtenstein, Suiza, Irlanda, Chipre, Panamá y Colombia. De igual modo, se estudia si Díaz Ferrán y Pascual llevaron a cabo la cesión ficticia de bienes muebles a Posibilitum.
Los investigadores también creen que Díaz Ferrán trató de ocultar a través de una sociedad interpuesta la propiedad de dos pisos de lujo en Nueva York por los que pagó, respectivamente, 7,8 y 2,7 millones de dólares; un chalet en Calviá (Mallorca) y un yate de 27 metros de eslora llamado 'Leuqar' -Raquel al revés, nombre de la esposa de Díaz Ferrán, Raquel Santamaría. El 5 de junio pasado el juez Velasco ordenó el bloqueo del yate, que estaba atracado en el puerto de Barcelona, para evitar un intento de traslado de la embarcación fuera del territorio de la Unión Europea (UE).
Además, Gonzalo Pascual, fallecido en junio pasado, habría donado antes de morir a sus cuatro hijos sus participaciones empresariales en tres empresas propietarias de varias fincas de caza en Toledo.
Los denunciantes acusaban a Díaz Ferrán y su socio de llevar a cabo "un deliberado, sistemático, doloso y perfectamente planificado proceso de alzamiento y ocultación apresurada de sus bienes personales con la finalidad de intentar eludir sus innumerables e importantísimas obligaciones de pago con respecto a sus acreedores".
En el domicilio del expresidente de la patronal la Policía encontró un kilo de oro y 150.000 euros en metálico. Según la cotización actual del oro, la cantidad de ese metal precioso estaría valorada en torno a los 60.000 euros. Además, los agentes intervenieron varios coches de alta gama.
Bloqueo de 50 millones
La Audiencia Nacional ha bloqueado hasta ahora unos 50 millones de euros en metálico y en cheques al portador que el entramado de Ángel de Cabo intentaba sacar de España y que provenían de sociedades del grupo Marsans y de otras vinculadas directamente a Gerardo Díaz Ferrán y Gonzalo Pascual, ya fallecido.
Según informaron a Efe fuentes de la investigación, la mayor parte de esa cantidad tiene su origen en el negocio de transporte aéreo, cuyo máximo exponente era la aerolínea Air Comet, o en Trapsa, la compañía de transporte terrestre que fue el germen del grupo Marsans, aunque también en patrimoniales como Holdisan y Grudisan, propiedad de Díaz Ferrán.
Díaz Ferrán y Pascual vendieron a Ángel de Cabo el grupo turístico en junio de 2010 dentro de un pacto para que el valenciano les ayudara a ocultar bienes y evadir capitales hacia paraísos fiscales para evitar pagar a los acreedores de Marsans, que atesoran unas deudas superiores a 1.000 millones de euros contra Teinver, Viajes Marsans, Tiempo Libre, Viajes Crisol y Rural Tours.
También declara por Caja Madrid
Por otro lado, el expresidente de la CEOE Gerardo Díaz Ferrán y el expresidente de Caja Madrid Miguel Blesa declararán este miércoles, como imputados ante el titular del Juzgado de Instrucción número 9 de Madrid José Silva por la concesión de un crédito de 26,6 millones de euros al empresario cuando era consejero de la entidad.
Fuentes jurídicas explicaron a Europa Press que la declaración, que se inició con una querella presentada por el sindicato Manos Limpias, se mantiene a pesar de que el expresidente de la patronal fue detenido el martes en el marco de la Operación Crucero.
La intención del juez de la Audiencia Nacional que instruye esta causa, Eloy Velasco, es tomar declaración a Díaz Ferrán a primera hora de la mañana para que posteriormente pueda dirigirse a la sede del Juzgado de Instrucción número 9, donde está citado a declarar a las 13.00 horas. Media hora antes lo hará Blesa.