En medio de estudios e informes que señalan que la independencia de Cataluña sería inviable económicamente, el Catedrático de Economía de la Universidad de Columbia Xavier Sala i Martín realiza su propio análisis de la situación. Recuerda a los que dicen que una Cataluña independiente nacería con una deuda insostenible, ya que tendría que asumir la parte proporcional de la deuda española, que "esta deuda la ha firmado el gobierno español y es él quien debe devolverla".
En su opinión, aquellos que escriben sobre la inviabilidad de la independencia catalana "dirán que Cataluña tendría que asumir la parte proporcional de la deuda del Estado español y que, sumada a la que ya tiene la Generalitat, tendría una deuda insostenible del 100% del PIB". "Dirán -añade- que fuera de España, Cataluña nunca tendrá financiación (ignorando que Cataluña no tiene financiación ahora aunque ahora está dentro de España)".
Sala i Martín piensa que toda esta retórica sirve para meter a los catalanes "miedo en el cuerpo" y pone en entredicho los estudios que han aparecido recientemente, como uno en el que se asegura que la independencia desplomaría la renta de Cataluña al nivel de Chipre. "Quien dice eso debería saber que el PIB per cápita de Chipre es un 81% superior al de Extremadura", señala.
Los supuesos estudios que asegurarían "con precisión" que el PIB catalán caería un 10%, un 30% o un 60% "serían todos una monumental farsa". En su opinión, ninguno de estos estudios tendría credibilidad, "porque sin saber como sería el proceso, si habrá boicots, en qué condiciones quedaría Cataluña dentro de Europa o a dónde iría a parar la parte que los catalanes han depositado en el FMI o el BCE es imposible saber cuáles serán los costes y los beneficios".
"Lo que es seguro, prosigue, es que si Cataluña es parte de España entonces sí que es corresponsable de la deuda del gobierno español. Pero si no lo es, entonces ya se verá".
Y añade que si España quisiese pasar la factura por el total correspondiente a la población de Cataluña, tendría que llamar a la embajada catalana y si el divorcio es amistoso, ya se hablaría". "Pero si no fuera amistoso y hablaran de boicots, amenazas y expulsiones de Europa, se comerían la deuda con patatas, porque el único responsable de la deuda es el gobierno de España".
¿Cómo ha llegado Cataluña a pedir el rescate?
