MADRID, 5 (EUROPA PRESS)
El ministro de Industria, Turismo y Comercio, José Manuel Soria, ha recordado que tanto su ministerio como el de Asuntos Exteriores están trabajando en la "flexibilización" y el "incremento" de los visados de los ciudadanos rusos.
Durante la entrega de las banderas 'Q' de Calidad, Soria ha respondido así a las peticiones del presidente de Rusia, Vladimir Putin, sobre la necesidad de que la Unión Europea facilite los trámites y acabe con los "estereotipos" rusos.
El ministro, que ha felicitado a las 174 playas y las 12 instalaciones náutico-deportivas reconocidas con este distintivo, al considerar que hacen "mejor" y cualifican" al turismo español como motor de la economía española.
Respecto al Plan Integral de Turismo, Soria ha insistido que la hoja de ruta global del Gobierno estará lista en "pocas semanas", a la vez que ha remarcado las tres pautas entorno a las que gira la iniciativa del Gobierno.
Así, ha manifestado la importancia de continuar con la promoción en los mercados emisores tradicionales, sin perder de vista a las economías emergentes que comienzan a convertirse en competidores de España.
Del mismo modo, ha apuntado hacia la necesidad de conseguir un marco normativo autonómico y local que ayude a los empresarios, al considerar que existen proyectos que pese a contar con financiación se encuentran numerosas restricciones, y hacia el aprovechamiento de la marca España.
LEY DE COSTAS.
En cuanto a la modificación de la Ley de Costas, el titular de Industria ha subrayado que la intención del Gobierno no es "infringir" la ley y causar daños al medio ambiente, sino conseguir un marco normativo homogéneo en cualquier lugar del territorio nacional.
"Añadir valor es compatible con la sostenibilidad del medio ambiente, el entorno y las costas. En Europa lo hace cualquier país ribereño", ha añadido Soria.
Por último, ha recordado que en 2011 España recibió 57 millones de turistas extranjeros, y experimentó un aumento del gasto aproximadamente del 7%, aunque ha reconocido que estos buenos datos se debieron en parte al desvío de turistas hacia los destinos nacionales por la 'primavera árabe'.