IU Parla denuncia que sigue existiendo un club privado en la piscina municipal

Parla, 28 may (EFE).- Izquierda Unida de Parla ha denunciado hoy que en la piscina municipal Javier Castillejo continúa utilizándose como un club privado uno de las vasos de las instalaciones, algo que ya fue denunciado hace casi un año tanto por IU como por el PP.

El grupo municipal de IU en el Ayuntamiento de Parla ha visitado las instalaciones deportivas en los últimos días y ha instado a la empresa concesionaria de la piscina, Parla Sport 10, a que el vaso usado sólo por abonados sea de libre acceso a todos los usuarios.

El exconcejal de Deportes Eugenio Santos ha recordado que, como ya denunciaron el año pasado, "este uso privado de un vaso no está contemplado en el pliego de condiciones, lo que supone un agravio comparativo con el resto de los vecinos de Parla".

En los últimos meses, tanto IU como el PP han preguntado en el Pleno municipal por la situación de esta instalación deportiva, sin recibir respuesta por parte del equipo de Gobierno (PSOE).

Por ello, desde IU han anunciado que van a exigir al equipo de Gobierno que el vaso de la piscina municipal utilizado el verano pasado exclusivamente por los abonados de Parla Sport 10 "sea de uso y disfrute libre para todos los usuarios".

Además, han avanzado que van a poner en marcha una campaña de información y difusión de esta situación por todo el municipio, ya que se trata de "un incumplimiento del contrato por parte de la empresa".

Izquierda Unida ha apostillado que van a estudiar llevar a cabo todas las acciones que vean convenientes para que esta piscina del Javier Castillejo sea de libre acceso a toda la ciudadanía parleña.

Los propios trabajadores de Parla Sport 10 ya denunciaron directamente que la empresa subroga algunos de sus servicios, como el vaso de esta piscina, en una reunión que mantuvieron con el alcalde, José María Fraile, el pasado mes de enero.

Entre 2010 y 2011 la plantilla de esta empresa concesionaria de varias instalaciones deportivas de la ciudad ha quedado reducida de 170 a solo 60 empleados, despidos todos ellos improcedentes que han provocado indemnizaciones de hasta 48.000 euros, hasta llegar a un total de 1.200.000 euros.