
Acusa a Barreda de pagar por volar desde Ciudad Real.
El Plan Económico Financiero de Castilla-La Mancha recibió el jueves el aprobado del Consejo de Política Fiscal y Financiera. Así, los primeros Presupuestos de María Dolores de Cospedal ascienden a 8.290 millones, de los que 7.325,8 corresponden a operaciones no financieras. El desafío es de gran envergadura, pues la autonomía que preside la secretaria general del PP debe reducir su saldo negativo desde el 7,3 por ciento con que cerró 2011 al 1,5 por ciento este año, lo que supone rebajar un agujero de 3.000 millones a 568 millones.
Para ello, las cuentas de Castilla-La Mancha tienen un techo de gasto de 5.648 millones, los gastos finalistas ascienden a 1.311 millones y a inversiones se destinarán 220 millones, con el propósito de "olvidar las obras faraónicas e infrautilizadas" y priorizar proyectos sociales que ayuden al crecimiento.
El Gobierno de Castilla-La Mancha prevé un ahorro de 1.665 millones mediante medidas correctoras de ingresos, que permitirán elevarlos en 195 millones y a través también de contención del gasto.
Entre las medidas correctoras de ingresos destaca el impuesto sobre ventas minoristas de determinados hidrocarburos, con los que se lograrán, a lo largo de 2012, 25,8 millones de euros. Además, está prevista la venta de varios inmuebles no útiles propiedad de la Junta, venta de vehículos, la puesta en marcha de colaboración público-privada en materia sanitaria y la venta de participación en empresas privadas, entre otras medidas.
El PSOE cifra en 10.000 los despidos que provocarán los Presupuestos de Castilla-La Mancha y augura otro tijeretazo en Navidad. Pero Cospedal también tenía cosas que decir ayer a los socialistas. Asegura que su predecesor en el cargo, José María Barreda, pagaba 100 euros por cada pasajero que volaba desde el aeropuerto de Ciudad Real en el primer trimestre de 2011 para mantener artificialmente esta malograda infraestructura.