Cádiz, 22 feb (EFECOM).- Los trabajadores de autobuses Comes, que hoy retomaron los paros parciales de seis horas, acusaron a la Junta de Andalucía de "favorecer" a la empresa y le exigieron que rescinda el contrato y retire las líneas concedidas a la patronal "si no aplica la ley y no presta el servicio contratado".
Por medio de un comunicado, el comité intercentros de Transportes Generales Comes explicó que aunque los próximos paros parciales están convocados para el 2 de marzo y se prevé una huelga de 24 horas el día 7, la administración autonómica "no exige a la empresa la concesión del servicio" y tampoco que se aplique la normativa adscrita desde Bruselas sobre seguridad y jornadas de trabajo.
No obstante, la plantilla, que advirtió de que irá a la huelga hasta que exista otro convenio colectivo, recordó que su principal reivindicación radica en la seguridad de los empleados y la ciudadanía.
Asimismo, volvió a criticar que la Junta subvencionase a la empresa "con cantidades millonarias de dinero público" y a cambio, no exige como contrapartida la prestación del servicio ante las incontables huelgas convocadas por la plantilla.
El Comité dijo que espera que las "presiones" que puedan estar ejerciendo las patronales del sector -Asintra, Fandabus y Fenebus para que no se firme el convenio- "no las estén considerando", pues más tarde o más temprano "tienen que acatar la ley".
Lo que es "inadmisible", añadió el Comité, es que la Junta "prolongue la agonía y no exista la prestación del servicio a los ciudadanos".
Los trabajadores pretenden con sus movilizaciones, que comenzaron el pasado diciembre, erradicar la inseguridad laboral, pues las jornadas rebasan las doce horas al volante. EFECOM
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