MADRID, 13 (EUROPA PRESS)
El grupo turístico Globalia cerró 2011 con un ligero aumento de los ingresos, que totalizaron 3.200 millones de euros, y una mejora del beneficio bruto de explotación (Ebitda), según declaraciones del presidente de la compañía, Juan José Hidalgo, en una entrevista con Hosteltur.
Según concretó, el comportamiento fue "desigual" según las áreas del grupo, de las cuales las peor paradas fueron la división hotelera y la aerolínea Air Europa, inmersa en un proceso de ERE y con una huelga indefinida de sus pilotos.
Hidalgo subrayó que el ejercicio se vio marcado por el cierre del espacio aéreo en Canarias por las cenizas volcánicas y el exceso de horas de vuelo por la estricta operativa de los controladores, además del cierre de operaciones en Cancún por el conflicto judicial de Oasis.
De cara a 2012 "la gran preocupación" está en Air Europa, debido a la alta competitividad en las rutas y a los elevados costes del combustible.
No obstante, prevé una mejora de la actividad hotelera una vez finalizado el conflicto de Oasis y una tendencia positiva en 'handling', agencias de viajes y touroperación.
"Ahora mismo el proyecto más importante es terminar de reorganizar todo nuestro grupo interiormente para optimizar su productividad y competitividad y adecuarlo a la situación del mercado que estamos viviendo", subrayó.
HACER LOS DEBERES.
De cara al futuro, Hidalgo confía en el devenir del grupo, "que ha subsistido perfectamente a muchos momentos difíciles". "De los tres años de crisis, dos ejercicios han sido bastante positivos y uno equilibro", recalcó.
"Lo único que tiene que hacer el grupo ahora es hacer sus deberes con ajustes y ahorros de costes y estructuras para que sea competitivo en un entorno cada vez más agresivo", destacó.
Hidalgo asegura que no hay "nada" sobre una posible venta del grupo a Orizonia, aunque preguntado por un operación corporativa, señala que "en esta vida todos tenemos un precio".
Sobre el conflicto con los pilotos, reiteró su postura de "no aceptar más amenazas del Sepla". "Este tema no tiene solución, la empresa aguantará lo que aguante, pero no va a haber más diálogo mientras los directivos del Sepla sigan manejando los destinos de la empresa", aseveró.
Sobre los cambios en el organigrama de la empresa, motivados por un movimiento de los hijos de Hidalgo, que pretenden tener más participación en el negocio, el empresario habla claro: "En Globalia ha habido un cambio de ministros pero el presidente sigo siendo yo", aseguró.