Mariano Rajoy, futuro presidente del Gobierno, ha prometido hoy en el Congreso recortar del déficit en 16.500 millones para el año 2012. Sin embargo, las medidas económicas y fiscales anunciadas hoy y el aumento de las pensiones supondrán un gasto para las arcas del Estado de 14.000 millones de euros.
Los técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha) señalaron que las medidas de reducción del Impuesto sobre Sociedades y la ampliación de la cifra de ventas afectará al 98,47% de las sociedades españolas y tendrá un coste de casi 9.500 millones de euros.
Gestha ha valorado así las medidas anunciadas por Mariano Rajoy en su discurso de investidura sobre la reducción del tipo del Impuesto sobre Sociedades al 20% para las empresas que facturen menos de 5 millones y la ampliación de la cifra de ventas hasta los 12 millones de euros y hasta los 500.000 euros de beneficios para las empresas de reducida dimensión.
Subida de pensiones
Rajoy ha asegurado hoy que actualizará las pensiones contributivas con el Índice de Precios al Consumo (IPC) a partir del 1 de enero. Y eso, a pesar de que la partida de pensiones es, con mucha diferencia, la mayor del presupuesto.
Según los datos Economía, en 2011 se van a destinar al pago de pensiones 112.000 millones de euros, lo que supone casi un tercio del total del presupuesto, unos 315.000 millones de euros. Elevarlas en función del IPC, actualmente en el 3%, supondría más de 3.000 millones de euros.
Deducción de vivienda
Los técnicos de Hacienda calculan que la medida de recuperar la deducción por inversión en vivienda habitual tendrá un coste anual de 1.500 millones de euros.
Desde Gestha se pide al Ejecutivo que esta medida y la de mantener el tipo del 4% del IVA en la adquisición de vivienda habitual y limitada a un importe, sean "medidas transitorias" hasta la recuperación de la actividad inmobiliaria.
Reforma del sector financiero
A todos estos gastos, habría que añadir el coste de la reforma del sector financiero anunciada hoy por el futuro presidente del Gobierno. Rajoy ha comentado que la primera medida en el sector financiero será el saneamiento de los balances, para lo que es necesario la venta de los inmuebles terminados en manos de las entidades.
Rajoy ha insistido en la necesidad de completar la reestructuración del sistema financiero despejando las dudas sobre las valoraciones de determinados activos, especialmente inmobiliarios.
El líder del PP no ha dado más pistas, por lo que es imposible hacer un cálculo del coste de la restructuración. Sin embargo, en las últimas semanas varias casas de análisis sí que han hablado de la opción de crear un banco malo y del coste que eso supondría para el Estado.
Los analistas estiman que una solución rápida, como un banco malo y/o forzar a la banca a incrementar sus reservas para asumir las pérdidas con dinero público, podría costar a las arcas del Estado hasta 100.000 millones de euros.
Esta cifra podría quebrar definitivamente las cuentas de España, tal y como le ocurrió a Irlanda, la otra gran burbuja inmobiliaria de la Eurozona, cuando recapitalizó sus bancos en 2010 y acabó con un déficit del 32%. Tuvo que ser rescatada e intervenida.
No habrá subidas de impuestos
Rajoy ha asegurado en el Congreso que para cuadrar sus cuentas su intención "es no subir los impuestos" porque no le parece lo más razonable y ha prometido que "intentará" que "no haya" dinero público en el proceso de sanear los balances de la banca mediante la venta de los inmuebles terminados en manos de las entidades.
Por lo tanto, a tenor de lo anunciado hoy, Rajoy maneja la austeridad como única arma para compatibilizar sus bajadas fiscales con el recorte del déficit.
Rajoy ha hablado hoy de redimensionamiento del sector público; reestructuración y supresión de Organismos autónomos, agencias y otras entidades públicas; la no reposición de personal en el sector público; y la reforma "inmediata" de las televisiones públicas.