Si ya antes de las elecciones celebradas el domingo, los posibles ministrables económicos del PP han sido los más barajados, dada la situación del país y de la eurozona, después, con más razón. El tiempo va definiendo nombres en el área económica del futuro Gobierno. El actual coordinador popular de Economía y diputado por Sevilla, Cristóbal Montoro, podría ser uno de ellos, según ha podido saber este diario. "No, muchas gracias": Rato descarta ser el próximo vicepresidente económico.
El exministro de Hacienda es uno de los puntales del equipo de Mariano Rajoy desde 2008. Cuando se elaboraron las listas al Congreso para las elecciones generales del 9 de marzo de ese año, el líder del PP quiso contar con nombres del equipo económico de los Gobiernos de Aznar, a los que la opinión pública identificara con la buena evolución de aquellos años. La economía iba a ser uno de los ejes, primero de la campaña electoral y luego, de la acción política de los populares.
Ofrecimientos
Al empezar 2008, Montoro era eurodiputado del Partido Popular, pues salió elegido en los comicios de 2004. Al volver a España, una vez acabada la legislatura europea en 2009, su intención era dedicarse a su empresa privada, que había constituido tras dejar de ser ministro.
Pero Rajoy le quería en la política nacional y le ofreció no sólo uno de los primeros puestos en la lista por Madrid, sino ocuparse de la elaboración y coordinación de toda la política económica que emanara del primer partido de la oposición.
Cuando todo el mundo daba por seguro que el portavoz económico sería Manuel Pizarro, fichado por Rajoy como el número dos de su lista, Montoro se hizo cargo del puesto. A Pizarro no le apartó del mismo su famoso debate con el ministro de Economía Pedro Solbes. Montoro ya tenía antes de eso la palabra de Rajoy sobre su destino. Para poder volver al Congreso de los Diputados abandonó la propiedad de su empresa.
La promesa
Junto al ofrecimiento de la coordinación, hubo otro: Rajoy prometió a Montoro que, si llegaba a la Presidencia del Gobierno, contaría con él en su Gabinete. Hay que tener en cuenta que son hechos de primeros de 2008, cuando el PP no tenía tan a la mano la victoria como en los comicios de 2011 pero el panorama podía serle favorable, pues las encuestas tampoco daban la mayoría absoluta al PSOE.
Entonces no pudo ser, pues los socialistas se alzaron de nuevo con la mayoría, aunque simple, pero la promesa se mantuvo en pie. De presentarse una tercera ocasión, el portavoz económico se sentaría de nuevo en el Consejo de Ministros, aseguró el líder del PP.
Ese día ha llegado. Fuentes del Partido Popular recalcan que Rajoy es un hombre de palabra con sus colaboradores. Los que conocen esta promesa, creen sin duda que la llevará a término y que uno de los sillones del Ejecutivo ya está decidido.
Distintos escenarios
Sin embargo, la situación no es la misma que la de principios de 2008. El presidente del Gobierno electo está teniendo muchas presiones para que la cara económica de su Gabinete sea una persona conocida internacionalmente, que los mercados reconozcan desde el primer día.
Y es muy probable que, a pesar de la anunciada reducción de ministerios, se desligue la vicepresidencia económica del departamento encargado de reducir el déficit y elaborar las cuentas públicas restrictivas, uno de los puntales de la política económica del PP. Por tanto, todo está abierto. A dos días de haberse celebrado las elecciones, todavía no se sabe cómo va a "construir" Rajoy su futuro Ejecutivo, cómo lo va a articular.
Lo cierto es que, ahora mismo, es Montoro quien está llevando en Génova todo el peso del proyecto de presupuestos, amén de todos los demás temas candentes económicos. Tiene, prácticamente, total libertad para proponer medidas y Rajoy, dicen en Génova, confía plenamente en su criterio.
Si no es como vicepresidente, porque este puesto esté comprometido debido a las presiones de la situación económica actual, en la sede popular dan por seguro que Montoro volverá a ser ministro de Hacienda, aunque a este Departamento se le pueda cambiar el nombre.
Otro de los ministrables, esta vez para Exteriores, que se dan por seguros es Miguel Ángel Arias Cañete. El exministro de Agricultura en la segunda legislatura de Aznar cuenta con una amplia experiencia internacional, especialmente en la Unión Europea.