
La semana pasada, la ministra de Economía, Elena Salgado, aseguró que la crisis de deuda soberana se combate con austeridad fiscal. Pero el economista Santiago Niño Becerra no está de acuerdo con esta afirmación. En su opinión, la única manera de luchar contra los problemas de deuda "es con quitas y con crecimiento".
Según señala hoy en su blog de La Carta de la Bolsa, se combate con quitas, porque asume que "nadie puede pagar todo lo que debe", y con crecimiento, "a fin de generar PIB que dé lugar a recaudación fiscal".
El catedrático de Estructura Económica vuelve a incidir, una vez más, en la idea de que prácticamente nadie puede pagar todo lo que debe: "las deudas de ayuntamientos y entes regionales va por ahí".
En su artículo, se remonta a la época del franquismo, cuando "los Gobiernos locales eran designados desde arriba, y abajo no se movía ni un papel si no era autorizado desde arriba" ignorando las carencias.
Más tarde, ya en democracia, "alguien vio esas carencias y vio también que España no generaba suficiente PIB para cubrirlas". La respuesta, según el economista, fue la aprobación de la Ley orgánica de financiación de las Comunidades Autónomas (Lofca) y la posibilidad de endeudamiento local "a fin de cubrir unos presupuestos manifiestamente insuficientes si se pretendía alcanzar unos estándares mínimos". Una solución "pésima", según Niño Becerra.
El "colofón" de este proceso han sido los últimos años. "Ingresos al alza a partir del ladrillo, pero gastos también al alza derivados de una población creciente (inmigración) y de unas alegres promesas dichas alegremente de forma alegre por parte de alegres políticos que pretendían mantener alegres a sus votantes".
Como consecuencia de estas actuaciones, "la realidad es hoy una deuda impagable, una financiación en retroceso, una población que exige las cosas que le prometieron y una situación económica con tendencia al empeoramiento".
Para Niño Becerra sólo hay una forma de solucionar tal escenario: "el deterioro de los servicios públicos, su encarecimiento para la población, el empobrecimiento de la ciudadanía, más desempleo, más carencias, y quitas muy, muy gordas". A lo que añade: "si se les ocurre otra cosa se la cuentan al próximo Gobierno".