
La semana pasada, los reguladores europeos acordaron prohibir las ventas cortas de acciones financieras en España, Francia, Italia y Bélgica, en un intento por frenar los "falsos rumores" que están desestabilizando los mercados. Al respecto, el economista Santiago Niño Becerra opina que tal prohibición es tan sólo un "mero parche" para ganar un poco de tiempo "otra vez".
En su blog de La Carta de la Bolsa, el catedrático de Estructura Económica de la Universidad Ramon Llull opina que tal decisión supone "intentar detener una gangrena con una tirita y un poco de desinfectante".
El pasado 11 de agosto, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) emitió un comunicado donde precisaba que la situación de "extrema volatilidad" en los mercados de valores europeos, en especial las cotizaciones de acciones de entidades financieras, "está incidiendo de forma clara en la estabilidad de los mercados y puede perturbar su ordenado funcionamiento".
Por este motivo, señaló, "resulta preciso revisar la operativa de los mercados de valores con el fin de asegurar el mantenimiento de la estabilidad financiera".
Niño Becerra opina que el problema existe "porque el origen está corrompido: por eso se produce la gangrena". De ahí que piense que la medida es tan sólo un mero retoque temporal.
En este sentido recuerda en su artículo que hace siete años nadie hablaba de los problemas de las ventas a corto ni se mencionaba la especulación. Tampoco en 2006 se denunciaban falsos rumores, precisa el economista. "Entonces triunfaban quienes hacían las cosas que había que hacer, y se hacía lo que era conveniente hacer".
A lo que prosigue: "ahora se ponen parches a riadas que no se pueden contener mientras, sobre la marcha, se va diseñando un nuevo manual del que a día de hoy tan sólo se tiene un esquema, en el que, efectivamente, no figura la especulación ni se permite salirse de lo que se marque y defina".
La prohibición de la CNMV, de carácter transitorio durante 15 días, podrá ser prorrogada si se considera necesario, y afectará a cualquier persona física o jurídica que lleve a cabo operaciones "que supongan la constitución o incremento de posiciones cortas sobre acciones españolas del sector financiero".
Por otro lado, en su escrito de este lunes, Niño Becerra realiza una sugerencia a quienes han calificado la situación vivida por las Bolsas en la última semana de "tormenta de verano". En este sentido, les pide que repasen la definición del fenómeno y señala que los mercados reaccionan a la baja "ante una situación de degradación continuada provocada por la imposibilidad de las economías planetarias de pagar todo lo que deben y en un escenario de alternativas indefinidas debido a un crecimiento imposible ya que el modelo que lo propiciaba está agotado".
Todo ello en un contexto de "solución obviamente imposible" en la medida en que "las herramientas de ese modelo agotado ya no sirven absolutamente para nada, como, prohibir las ventas a corto. Y eso, pienso, no se parece nada a una "tormenta de Verano", absolutamente nada", sentencia Niño Becerra.