El euribor, el índice al que se referencia la mayoría de hipotecas en España, cerrará julio en torno al 2,18%. De cara a final de año no se esperan grandes cambios, pero ¿qué ocurrirá el próximo? La mayoría de analistas descuenta que el índice escalará hasta el 3% en un contexto en el que el Banco Central Europeo (BCE) situará el precio del dinero en torno al 2%.
¿Qué repercursiones habrá para la economía española y para sus ciudadanos? José Luis Martínez, economista de Citi, explica que el mercado ya está descontando que el BCE seguirá subiendo sus tipos de interés en los próximos meses.
Según sus cálculos, lo hará en más de medio punto en un año desde el 1,5% actual. Opina, no obstante, que de materializarse esta subida "la repercusión en los tipos hipotecarios no sería importante".
Por su parte, José Carlos Díez, economista jefe de Intermoney, piensa que el euribor permanecerá estable y que incluso mostrará una pequeña ligera tendencia a la baja en los próximos meses.
En su opinión, los acuerdos alcanzados para ayudar a Grecia y aportar estabilidad a la Eurozona "provocarán un cambio en la política de tipos de interés del BCE". En este sentido, piensa que el organismo debe apoyar las medidas tomadas el jueves, por lo que anticipa que la institución monetaria "mantendrá el precio del dinero estable en lo que queda de año". De hecho, piensa que los tipos de interés seguirán en un "nivel muy bajo en Europa durante un periodo largo", "siempre y cuando el precio del petróleo lo permita".
A su juicio, "estos cambios en la postura del BCE son extraordinariamente favorables para España y los hipotecados españoles".
El control lo tienen los acreedores
Otros analistas, como Daniel Argumedo, director técnico de Finagentes Gestión, opina que la gestión que se está realizando de los tipos de interés -con dos subidas de un cuarto de punto en mayo y julio- "es un ejemplo de que el control lo tienen los países acreedores, como Alemania".
Este analista espera un comportamiento más moderado de los precios en los próximos meses. Al respecto, prevé que la presión inflacionista se irá limitando, a pesar de lo cual ve probable que haya más subidas de tipos en 2012, y cabe la posibilidad de que las alzas a lo largo de ese ejercicio sean de tres cuartos de punto.
Para Argumedo, estos incrementos no van a venir bien a España, si bien piensa que son independientes de los factores que afectan a las economías periféricas. "España ya es un país muy endeudado, y el aumento del peso de esa deuda es una mala noticia", precisa. Según sus previsiones, el euribor se situará entre el 3 y el 3,35% el próximo año.
Algo más pesimista se muestra Juan Carlos Martínez Lázaro, profesor de Economía del IE Business School. En su opinión, el euribor se encuentra en estos momentos en niveles "bastante bajos". Por eso, cree que no dejará de subir a lo largo del año, y de cara al próximo ejercicio se situará en el 3%, con un diferencial de entre 50 y 60 puntos básicos sobre los tipos oficiales.
A su juicio, esta subida del euribor dañará en general al conjunto de la economía, no sólo al sector inmobiliario. "Que la financiación esté disponible o no será más importante que el aumento de las tasas, y también los diferenciales que los bancos aplicarán a la hora de conceder créditos", concreta.
Tal y como explica, en estos momentos "España tiene problemas con la reducción de la renta disponible de las familias por dos factores claves: la inflación, que es muy alta para una situación de crisis como la actual, y la consiguiente subida de los tipos de interés, que provoca un alza del euribor".
A su juicio, para que el sector inmobiliario salga de su actual situación debe terminar el ajuste de precios, que todavía no ha finalizado.
(Texto ilustrado por Aleix Saló, autor del cómic 'Españistan')