La Reserva Federal observa un alto grado de incertidumbre en las perspectivas económicas del país y le preocupa que las presiones en los mercados financieros puedan provocar problemas más amplios, afirmó ayer su presidente. Ben Bernanke. Además, añdió que los miembros deben decidir si las "renovadas turbulencias" en los mercados han trasladado los riesgos entre inflación y crecimiento en la próxima reunión.
En un discurso ante empresarios en Charlotte, Carolina del Norte, Bernanke dijo que los encargados de las políticas económicas estaban estudiando cuidadosamente la información financiera "desigual", con un sector inmobiliario deprimido, un mercado laboral fuerte y unos gastos de los consumidores en la parte baja de las previsiones.
Las turbulencias han "revertido parcialmente" las mejorías del mercado en septiembre y octubre y han creado condiciones financieras más ajustadas que tienen el "potencial de imponer limitaciones adicionales en la actividad del mercado inmobiliario y otros sectores sensibles al crédito".
En línea con Kohn
"Bernanke ha cruzado la puerta que abrió Kohn y cada vez parece más claro que la Fed está preparando otra bajada de tipos en diciembre", señaló Michael Feroli, economista de JP Morgan. Anteayer, Donald Kohn, vicepresidente de la Reserva Federal señaló que la política de la Fed debería ser pragmática, flexile y ágil, lo que se interpretó como un guiño a una nueva bajada de tipos.
Además, Bernanke admitió que el crecimiento económico estadounidense, que se mantuvo robusto en el tercer trimestre, debería desacelerarse "significativamente" en el cuarto trimestre.
Dijo además que la Fed, cuyo comité de política monetaria se reúne el 11 de diciembre, pondrá "especial atención" a cómo las presiones del mercado financiero impacten el resto de la economía y tendrá que ser "excepcionalmente alerta y flexible" para enfrentar la inusual incertidumbre económica.
