China podría limitar el aumento de las tasas de interés durante el resto del año, y centrarse en otros instrumentos para la lucha contra la inflación sin asfixiar el crecimiento económico del país, según las previsiones de algunos bancos.
El Banco Central de China efectuó ayer un nuevo aumento de 50 puntos básicos de la tasa de las reservas obligatorias de los bancos, medida que se aplicará a partir del 18 de mayo. Las reservas obligatorias son los depósitos que los bancos están obligados a depositar en el Banco Central y no pueden prestar. El aumento de estas reservas permite frenar el volumen de los nuevos préstamos que los bancos pueden acordar y reducir el crecimiento de la masa monetaria.
Goldman Sachs y Deutsche Bank prevén que los responsables políticos sólo elevaran una vez más este año los costes de endeudamiento. Las mayores tasas de interés pueden frenar el crecimiento y permitirá atraer capital especulativo, o "dinero caliente", a la economía de mayor crecimiento. Una de las herramientas alternativas que citan os expertos de estas entidades es la apreciación más rápidas del yuan, como solicita EEUU.
"El espacio para más alzas de tasas es muy pequeño este año ante las preocupaciones de la llegada de dinero especulativo y el crecimiento económico", comenta Ting Lu, economista en Hong Kong de Bank of America Merrill Lynch. "A pesar de ello estamos seguros de que habrá nuevos incrementos de la tasa de las reservas", añade.
Los analistas de Goldman estiman que las autoridades pueden permitir que el yuan sigue subiendo frente al dólar a un ritmo del 6% anual. La moneda se negociaba hoy a 6,5013 yuanes por dólar en Shanghai.
China vuelve a subir la tasa de reservas
