
El Banco Central de China ha efectuado un nuevo aumento de 50 puntos básicos de la tasa de las reservas obligatorias de los bancos, medida que se aplicará a partir del 18 de mayo. La decisión tiene como objetivo frenar la liquidez de la economía y reducir la alta inflación.
Este es el quinto aumento de tasas este año, que no son las mismas para todos los establecimientos. Las reservas obligatorias son los depósitos que los bancos están obligados a depositar en el Banco Central y no pueden prestar.
El aumento de estas reservas permite frenar el volumen de los nuevos préstamos que los bancos pueden acordar y reducir el crecimiento de la masa monetaria.
Lucha contra la inflación
La inflación se ha convertido en una auténtica obsesión para el gobierno chino, que ha asegurado que luchará por reducirla y para que no provoque un recalentamiento de una economía que ha crecido al 9,7% interanual en el primer trimestre del año.
Además, el Ejecutivo chino teme que un aumento de los precios produzca inestabilidad social, como ocurrió en los años 80, cuando los niveles de inflación llegaron a superar el 10% y fueron uno de los factores desencadenantes de las protestas de Tiananmen.
El índice de precios al consumo (IPC), principal indicador de la inflación, subió un 5,3% interanual en abril en China. Aunque fue menor que el 5,4% registrado en marzo, se mantiene muy lejos del objetivo del 4% fijado por el Gobierno para el 2011.
Las reservas de cambio de China, las más importantes del mundo, alcanzaron 3,0447 billones de dólares a fin de marzo, según el Banco Central chino.
Las reservas, que ya habían marcado un récord a fines de 2010 totalizando 2,847 billones de dólares, aumentaron 24,4% en un año, precisó el Banco Central.
China mantiene su tasa de cambio a un nivel muy bajo, lo que favorece sus exportaciones, mientras que el flujo de capitales que ingresa en el país infla la masa monetaria y crea inflación.