La mayoría de los acreedores de Ploder Uicesa ha respaldado la propuesta de pago de deuda efectuada por la empresa, que de esta forma se asegura superar el proceso del concurso de acreedores en que está inmersa desde febrero del pasado año.
MADRID, 5 (EUROPA PRESS)
En concreto, el 56,46% de los acreedores ha validado la propuesta anticipada de convenio formulada por la empresa, que cuenta con unos 7.000 acreedores y un pasivo de 241 millones de euros, según datos de Iure Abogados, despacho especializado en derecho concursal, que recoge Europa Press.
De esta forma, Ploder se convierte además en una de las primeras empresas de entre las declaradas insolventes en los últimos años que logra que prospere una propuesta de convenio anticipado.
La aprobación de un convenio de acreedores constituye el paso determinante para que una compañía supere un proceso concursal. En virtud de este convenio, se fijan el calendario y las condiciones en que la empresa abonará las deudas a sus acreedores.
En el caso de Ploder, ha pactado con sus acreedores un convenio anticipado, lo que ha permitido a la empresa 'ahorrarse' la segunda fase de un proceso concursal, la de negociación del convenio, y acortar así el trámite.
De esta forma, una vez concluida la primera parte del concurso, la denominada 'fase común' (con la presentación del informe concursal definitivo por parte de los administradores concursales de la empresa), el juez procede a aprobar el convenio anticipado y resolver así el concurso.
En el caso de Ploder, una vez que el Juzgado de lo Mercantil número 9 de Madrid dictó recientemente la 'fase común', procedió a tramitar la votación del convenio.
En virtud del convenio anticipado pactado por Ploder y sus acreedores, la compañía se compromete a pagar el 85% de su deuda (con una quita del 15%) en un plazo de diez años a partir de su aprobación.
Según datos del primer informe concursal, la constructora cuenta con un patrimonio valorado en 190 millones de euros, frente a un pasivo de 293 millones.
Ploder Uicesa se declaró en concurso voluntario de acreedores en febrero de 2010, tras concluir sin acuerdo el periodo de cuatro meses que se dio para renegociar su deuda cuando en octubre de 2009 reconoció su situación de insolvencia ante el juez.