Roma, 8 oct (EFECOM).- Unos 16 millones de trabajadores italianos están llamados desde hoy y hasta el próximo miércoles a participar en un referendo convocado por los sindicatos para aceptar o rechazar las medidas laborales aprobadas por el Gobierno, entre ellas la nueva reforma sobre la edad de jubilación.
Con un "sí", los trabajadores, jubilados y también aquellos con contratos precarios aceptarán el proyecto que incluye la reforma de las pensiones y prevé, según el Gobierno, medidas para mejorar los contratos de los jóvenes, las prestaciones por desempleo, e incentivos a la competitividad de las empresas.
Mientras que si gana el "no", los sindicatos tendrán que retirar el apoyó que dieron al paquete de medidas y presionarán para que se introduzcan algunos retoques, antes que de que el texto llegue al Parlamento para su aprobación.
Es la segunda vez que los trabajadores son llamados a expresarse sobre un proyecto de ley, después del referendo que se celebró en 1995 sobre la reforma de las pensiones, en el que participaron 4 millones de personas y ganó el "sí" con un 64%.
Los sindicatos mayoritarios, el de izquierdas CGIL, el socialista UIL y el democristiano CISL, han intentado convencer a los trabajadores en más de 53.000 asambleas de que las medidas serán beneficiosas.
Mientras que FIOM, la federación metalúrgica del CGIL, ha protagonizado un ruptura histórica al revelarse contra el sindicato de referencia y rechazar las medidas, sobre todo en lo que se refiere a la reforma de las pensiones.
Los sindicatos esperan que participen en la consulta, que se realiza en los lugares de trabajo y en algunos círculos sociales o para jubilados, al menos cinco millones de trabajadores.
El "sí" parece garantizado, pero la victoria del "no" puede abrir una profunda brecha entre los trabajadores y los sindicatos, ya que éstos firmaron el acuerdo con el Gobierno sin consultar a sus representados.
Así como, acrecentará las rencillas entre los representantes de los metalúrgicos, con 350.000 inscritos, y el sindicato confederal, CGIL.
La FIOM ha anunciado que cualquiera que sea el resultado del referendo convocará movilizaciones en protesta contra el proyecto de ley.
El malestar ya se vio durante la semana pasada cuando los representantes de CGIL, CISL y UIL fueron recibidos con coros de protesta mientras explicaban el referéndum en la fábrica más grande de la casa automovilística Fiat, en Mirafiori (norte), donde trabajan unos 15.000 empleados y considerada símbolo del trabajo en el país.
Pero paralelamente a la votación de los trabajadores, el Gobierno vive su particular división, ya que el ala más a la izquierda de la coalición gubernamental pretende que se realicen algunos cambios.
El secretario de Refundación Comunista, Franco Giordano, aseguró hoy en una entrevista publicada en el diario "La Repubblica", que si no se producen modificaciones "no se garantizará el apoyo durante la aprobación en el Parlamento".
Por su parte, el Ministro de la Universidad y representante de Demócratas de Izquierdas, Fabio Mussi, afirmó que si el proyecto de ley queda así como se ha presentado, no lo votara.
Con este proyecto se modifica la ley de jubilación, aprobada por el anterior ejecutivo conservador, por la que a partir de 2008 había que tener 60 años para lograr la pensión, en lugar de 57, siempre con 35 años de cotización.
Con la nueva reforma, en 2008 se accederá a la pensión a los 58 años y desde 2009, aumentará gradualmente con un sistema de cuotas que combina la edad del trabajador con los años cotizados, de manera que en 2013 hará falta tener un mínimo de 62 años.
Además, se prevé invertir 700 millones de euros para aumentar las prestaciones por desempleo.
Mientras que para incentivar a las empresas se concederá una desgravación de hasta el 25%, a las que renueven el contrato a sus trabajadores.
Pero será más difícil renovar un contrato después de 36 meses de trabajo, ya que después o el empleado pasará a ser indefinido o se terminará la colaboración.
Sobre este último punto, las fuerzas de la izquierda y la FIOM consideran que esto supondrá mayor precariedad entre los trabajadores. EFECOM
ccg/prb
Relacionados
- Economía/Motor.- Los trabajadores de Michelin aceptan en referéndum la última propuesta de convenio colectivo
- Trabajadores de Mina La Camocha aceptan acuerdo y suspenden protestas
- Trabajadores automotrices brasileños aceptan propuesta y abandonan huelga
- Trabajadores automoción brasileños aceptan propuesta y abandonan huelga
- Trabajadores Cofrisa aceptan plan indemnizaciones por cierre de la planta