París, 1 oct (EFECOM).- Dominique Strauss-Kahn, que asume las riendas del Fondo Monetario Internacional (FMI) el mes próximo, defendió hoy un incremento del peso de los países latinoamericanos en la toma de decisiones de la organización para combatir una desconfianza justificada en el pasado.
"Es verdad que hay mucha desconfianza en América Latina" hacia el Fondo y "no está injustificada", señaló en su primera comparecencia pública tras su designación el pasado viernes.
Señaló que en ocasiones, como en la crisis argentina de comienzos de la década, las recomendaciones del FMI se habían percibido como "muy duras" en Latinoamérica.
Pero destacó que todos los representantes de los países latinoamericanos han apoyado su candidatura como nuevo director, lo que a su juicio ilustra su esperanza de que las políticas del FMI hacia la región pueden cambiar con las reformas que defiende.
"El Fondo debe estar para ayudar a los pueblos, a veces corregir los errores, y no para imponerles pociones insoportables", afirmó.
El ex ministro socialista francés subrayó la pertinencia de un cambio del sistema de cuotas en el FMI, y citó los casos de México y Brasil, cuyo peso en el organismo "debe mejorar" porque están poco representados respecto a otros países europeos mucho más pequeños.
"La reforma de las cuotas debe permitir dar a esos países más voz, pero no hay que quedarse allí" porque eso no bastará, advirtió.
Adelantó que la cuota de Brasil, que actualmente es del 1,4% podría aumentar en dos, tres o cuatro décimas cuando la reforma se produzca, y eso sólo si el proceso llega a buen puerto.
"Cuando Brasil haya llegado a 1,6%, 1,7%, 1,8%, eso no cambiará fundamentalmente la situación en torno de la mesa", y por eso "hay que ir más allá", indicó.
Su propuesta es que las decisiones más importantes del Fondo se tomen por una doble mayoría -una en función del número de países y otra en función de la cuota de cada país en la organización- para que "se escuche mejor la voz de países que representan a cientos de millones de hombres y mujeres que tienen algo que decir sobre su futuro".
El incremento de las cuotas de los países emergentes se tendrá que hacer en detrimento del peso de los Estados europeos y Rusia, que deberán transferir "un poco de sus cuotas", previno.
Strauss-Kahn, que esta mañana había sido recibido por el presidente francés, Nicolas Sarkozy, se mostró convencido en París de que Estados Unidos no utilizará su derecho de veto para obstaculizar una evolución del Fondo.
"Tengo la certidumbre del interés para Estados Unidos de un fondo que funcione", y eso no puede ser mientras cientos de personas carezcan de representación adecuada, dijo.
El futuro director del FMI, que relevará al español Rodrigo Rato el próximo 1 de noviembre, subrayó que "ya no tiene razón de ser" el acuerdo por el que los europeos decidían a quién ponían al frente del Fondo, mientras los estadounidenses hacían lo mismo con el presidente del Banco Mundial.
"Un ciudadano de cualquiera de los 185 Estados miembros debe poder dirigir el Fondo desde el momento en que tenga las competencias", comentó. EFECOM
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