
El Producto Interior Bruto (PIB) creció un 2,8% anualizado en el cuarto trimestre, según la primera revisión del dato que realiza el Departamento de Comercio. Este dato supone un descenso de cuatro décimas con respecto a la primera estimación, que calculaba un avance del 3,2%.
Además, el dato es peor de lo previsto por el mercado. Los analistas consultados por Bloomberg esperaban una revisión al alza de una décima, hasta el 3,3% anualizado.
El consumo personal, el principal contribuyente al PIB, también se ha revisado a la baja y repuntó el 4,1%, frente al 4,4% publicado en el dato anterior y el 4,2% esperado.
En cuanto al gasto de los gobiernos locales y federales, se redujeron un 2,4%, frente al descenso previsto del 0,9%. En el tercer trimestre, esta partida subió el 0,7%.
Según el Departamento de Comercio, el aumento el PIB en el cuarto trimestre se vio impulsado por las contribuciones positivas del gasto de consumo personal, así como de las exportaciones y de las inversiones fijas no residenciales, que fueron parcialmente contrarrestadas por el impacto negativo procedente de las inversiones privadas en inventarios y el gasto público a nivel local y federal.