MADRID, 17 (EUROPA PRESS)
UGT ve razonable que se anule el bonus de 25 millones de euros a los directivos de Caja Madrid, pero subraya que sus órganos de gobierno lo autorizaron por unanimidad en 2007 con el objetivo de fidelizar al personal clave de la entidad, indicaron a Europa Press fuentes del sindicato.
UGT considera adecuado que se anule el pago del bonus porque en la actualidad hay 2.900 trabajadores afectados por un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) y el Sistema Institucional de Protección (SIP) que lidera Caja Madrid ha recibido recursos públicos del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) por importe de 4.465 millones de euros.
"En este momento no tiene ningún sentido que Caja Madrid pague un bonus de este importe a los directivos", sostuvieron las fuentes de UGT, si bien subrayaron que "no es verdad que no se conociera el pago de este bonus", que recibió el visto bueno de todos los órganos de la entidad competentes en cuanto a las retribuciones.
En este sentido, agregaron que pese a que esta retribución a directivos de Caja Madrid no es aceptable en las actuales circunstancias, complejas para la economía en general y la entidad en particular, el pago de bonus era una práctica habitual y aceptada en 2007, fecha en la que se acordó.
"Aunque en términos conceptuales pueda suscitar rechazo, el bonus era lo normal en 2007 en todo el sector financiero", enfatizaron las fuentes del sindicato. "Era sabido que los directivos de Caja Madrid contaban con él", insistieron.
El consejo de administración de Caja Madrid ha aprobado por unanimidad finalizar, no renovar, y no reconocer, el derecho de cobro del plan de incentivos a largo plazo para la alta dirección de la entidad durante el periodo 2007-2010.
La decisión del máximo órgano de gobierno de la entidad se ha basado en dos puntos: la percepción de fondos públicos a través del FROB y la existencia de legislación europea sobre la materia que afectará a esta cuestión cuando se traslade a la normativa española.
Esta decisión se produce después de que la Comunidad de Madrid trasladara a Caja Madrid su oposición al pago de bonus a diez directivos de la caja, entre ellos el ex presidente, Miguel Blesa, que se embolsarían 25 millones de euros en función de un plan de incentivos impulsado por el propio Blesa. Su sucesor en el cargo, Rodrigo Rato, ha decidido acabar con estos bonus.
Además de Blesa, figuran entre dichos directivos, el actual director de participadas de Caja Madrid, Matías Amat, y el director de riesgos, Ildefonso Sánchez. Asimismo, el plan incluye a Ramón Ferraz, Juan Astorqui, Carlos Martínez, Rafael Spottorno, Mariano Pérez Claver y Carmen Contreras.