
El Producto Interior Bruto (PIB) francés se incrementó un 0,4% en el tercer trimestre del año respecto a los tres meses anteriores, según lo datos publicados hoy por el Instituto Nacional de Estadística (Insee). El dato es peor de lo previsto y supone una ralentización de la economía.
Los 20 analistas consultados por Bloomberg esperaban de media un avance de la economía gala del 0,5%, después de que en el segundo trimestre del año, la segunda economía de la zona euro creciera un 0,7% en tasa intertrimestral.
El Insee, al publicar hoy sus primeros resultados del tercer trimestre, precisó que entre julio y septiembre el consumo aumentó un 0,6%, cuando en el trimestre anterior lo había hecho un 0,3%.
Por el contrario, la inversión (+0,5%) subió a un ritmo inferior al constatado en el segundo trimestre del año (+0,9%).
El comercio exterior tuvo un impacto negativo sobre el PIB trimestral de cinco décimas, por el efecto de un ascenso del 4,1% de las importaciones (tras +3,9%) y del 2,5% de las exportaciones (después del +2,6%).
Ese efecto negativo se vio compensado en parte por la aportación de tres décimas por las variaciones de existencias, que entre abril y junio habían implicado una ganancia de seis décimas.
Previsiones
El Gobierno francés estima que el PIB el país crecerá un 1,6% en 2010, lo que eleva además en dos décimas la última previsión del organismo de estadísticas. El Insee esperaba un avance del 0,4% tanto en el tercer como en el cuarto trimestre del año.
La previsión del Ejecutivo galo de crecimiento del PIB para 2011 se sitúa en el 2%.