Bielorrusia ha reculado y ha decidio dar el primer paso para poner fin al reciente conato de guerra del gas. El viceprimer ministro bielorruso, Vladímir Semashko, ha anunciado hoy que su país ha pagado de manera íntegra su deuda a Gazprom, después de que hoy la petrolera estatal rusa haya anunciado que endurecía de nuevo su restricción.
"Hemos pedido prestados 200 millones de dólares y hoy a las 16:00 horas (13.00 GMT) hemos transferido a Gazprom 187 millones de dólares para el pago de la deuda", afirmó, según irecoge la agencia rusa Interfax.
El Gobierno de Dimitri Medvedev acusaba a Bielorrusia de haber pagado 150 dólares por cada 1.000 metros cúbicos, en vez de los 169,20 dólares solicitados por Gazprom en el primer trimestre y los 184,40 dólares en el segundo trimestre, lo que ha generado una deuda de casi 200 millones de dólares.
Sin embargo, desde Minsk siguen exigiendo el pago de los derechos de tránsito a Rusia. Semashko indicó que ahora Bielorrusia tiene "todo el derecho de exigir a Gazprom el pago de los 260 millones de dólares que adeuda por concepto de tránsito antes de las 10:00 horas (07.00 GMT) del 24 de junio" y añadió: "Si esto no ocurre, nos veremos obligados a cerrar el tránsito".
Ayer mismo, el Gobierno bielorruso amenazó con cortar el grifo hascia Europa si no recibían el dinero de Moscú. "Hasta que hayamos cobrado la cantidad correspondiente a los seis últimos meses no se reanudará el tránsito del gas", afirmó el presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko.