
Francia ha sido eliminada del Mundial. La noticia, que habrá entristecido a muchos, ha provocado sonrisas de alivio en la sede de Berkshire Hathaway. Con la descalificación de los franceses, la firma de Warren Buffett se ha ahorrado unos 30 millones de dólares.
La explicación es sencilla: Berkshire había firmado un seguro con el que un cliente -cuya identidad no ha sido revelada- se protegía de la victoria de la selección gala. Si esto sucedía, la compañía de Buffett tendría que abonarle unos 30 millones de dólares, según recoge la publicación BusinessWeek.
El propio inversor, conocido como el Oráculo de Omaha, informó el pasado mes de marzo de la existencia del contrato de esta inusual cobertura. Aunque en ese momento Buffett parecía decantarse por otro resultado. "Creo que vamos a perder 30 millones o algo así", afirmaba entonces el inversor en una entrevista a la CNBC.
Buffett también dio detalles acerca del responsable de la venta del seguro, Ajit Jain, responsable de una de las unidades de su aseguradora. En palabras del gurú financiero, se trata de la persona que a la que hay que llamar "cuando se necesita asegurar algo demasiado grande y raro". En su haber cuenta con pólizas contra la cancelación de un torneo escolar de baloncesto o contra desastres naturales.
Cliente misterioso
Sobre lo que no reveló nada el dueño de Berkshire fue del cliente que compró el seguro, aunque puede tratarse de cualquier compañía que quisiera protegerse de los costes ligados a una victoria del equipo francés, según señala un experto a BusinessWeek.
Por poner un ejemplo, Carrefour, la mayor cadena minorista de Europa, tenía una promoción por la que se ofrecía a devolver el dinero a todos aquellos que comprasen una televisión de pantalla plana si Francia ganaba el Mundial. Si llegaba a la final también había premio: abonaría la mitad del precio del televisor.