Catalán considera un "escándalo" la "sangría" en Viajes Marsans y cree que el presidente de la CEOE debería estar en "un lugar más recogidito"
MADRID, 28 (EUROPA PRESS)
El presidente de AC Hoteles, Antonio Catalán, aseguró hoy que el sector turístico está ante un final de ciclo, en el que el crecimiento experimentado en 2007 "no va a volver", y en un "momento preocupante" en el que todo está basado en la capacidad para adaptarse, abocado a bajar los precios.
Durante su intervención en el 'I Foro Innovación + Turismo: Estrategias para salir de la crisis', organizado por el periódico La Razón, señaló que el sector turístico en general está viviendo "por debajo de precio" en un escenario que obliga a pensar de "forma diferente".
"Bajar el precio nos lleva directos a una situación de quiebra", afirmó el hotelero, quién constató que los efectos de la crisis en la cadena hotelera comenzaron a partir de agosto de 2008, con caídas del 12%, del 18%, del 20% y del 25%, en los meses sucesivos, lo que motivó que la compañía se pusiera "manos a la obra" para ganar en eficiencia.
Ahora, indicó, AC Hoteles ha incrementado un 45% su resultado en abril y empieza a crecer otra vez, en un momento en el que hay oportunidades. No obstante, el hotelero auguró cambios importantes en el sector para los que habrá que estar preparados.
Para ello, Catalán explicó que la compañía ha revisado todos los aspectos desde el laboral, el producto, hasta el uso de la tecnología. "Estamos en una coyuntura en la que las normas de juego deben cambiar", indicó.
"No puede ser que haya sangrías como las de Viajes Marsans y que veamos a Díaz Ferrán ante la CEOE. Es un escándalo global, debería estar recogidito en un lugar más discreto", apuntó, para señalar que a pesar de la deuda que acumula, "aquí no pasa nada". "Hay un montón de hoteles que no pagan la Seguridad Social y aquí no pasa nada", insistió.
Catalán hizo hincapié en que la economía de mercado debe "garantizar las mismas reglas de juego para todo el mundo". "La bajada de precios viene provocada por la gente que está haciendo cosas que no son razonables", apuntó.
En esta línea, defendió que el sector necesita gente innovadora, también entre los empleados, para hacer cátedra en un momento de cambios sustancial en la que el objetivo es "salir de ésta".