
La economía de Estados Unidos registró en el primer trimestre del año un crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) del 3% anualizado, dos décimas menos de lo registrado en la anterior estimación del mes de abril.
Se trata de la primera revisión realizada por el Departamento de Comercio norteamericano del dato preliminar anunciado el pasado 30 de abril. El 25 de junio se realizará la última revisión, en la que se dará el dato definitivo.
El dato de hoy es, además, peor de lo previsto por el mercado. Los analistas consultados por Bloomberg esperaban de media una corrección al alza hasta una tasa de crecimiento anualizada del 3,4%.
El incremento del PIB en el primer trimestre, que es inferior al de los tres últimos meses de 2009 (+5,6%), se vio impulsado por el incremento del gasto de los consumidores (3,5%), de las inversiones en inventarios privados, las exportaciones y la inversión no residencial. Estos datos fueron compensados, sin embargo, por los descensos del gasto público y la inversión residencial.
El consumo personal, el principal contribuyente al PIB, también se ha revisado a la baja y finalmente creció el 3,5%, frente al 3,6% publicado en el dato anterior. Aún así, es el mejor dato desde 2007, después de que registrara un alza del 1,6% den el último trimestre de 2009.
El incremento de la inversión empresarial, por su parte, ha sido reducido a una tasa de crecimiento del 13,1%, desde el 14% inicial.